«Es arrogante decir que nuestros emigrantes son manipulables»

GALICIA

21 nov 2008 . Actualizado a las 12:35 h.

Emigrante por designios políticos, María Xosé Porteiro acaba de cumplir su primer año como delegada de la Xunta en Argentina, donde fue presentada por Emilio Pérez Touriño como la embajadora de Galicia. Desde ese papel reclama más respeto y mayor compresión hacia la emigración, además de reconocer que el trabajo de la primera delegación exterior de la Xunta no ha hecho más que empezar.

-En lo que va de año el censo de emigrantes en Argentina ha crecido en 600 más que en el 2007. Aunque no supone un aumento extraordinario, sí refleja la tendencia de crecimiento de la emigración gallega en todo el mundo ¿Percibe esa mayor demanda por lograr la nacionalidad española?

-Se trata de personas que emigraron hace muchos años pero no se habían dado de alta en el censo de residentes ausentes. Al hacerlo pueden votar y solicitar prestaciones sociales que la ley reconoce, exclusivamente, a los emigrantes censados. Por lo tanto no es del todo correcto hablar de aumento de la emigración, sino de una actualización de personas que ya estaban aquí. Una vez aclarado lo anterior, creo que la apertura de la posibilidad de obtener la nacionalidad española sí ha generado una gran expectativa entre los descendientes de emigrantes, pero quiero dejar claro que quienes se están dando de alta en el censo ya tenían la nacionalidad.

-¿Esa expectativa refleja un sentimiento de españolidad no expresado antes o responde a la búsqueda de mejores condiciones sociales de emigrantes y sus descendientes?

-Creo que la presencia de España en esta parte del mundo ha crecido mucho, en parte debido a la democratización de las comunicaciones y a la información que proviene de ahí. Todo esto supone que el vínculo de pertenencia se refuerza y genera nuevas expectativas al conocerse programas y ayudas que pueden ser de interés para quienes, siendo españoles, viven fuera, y porque permite reconocerse legalmente como ciudadanos de un país del que se sienten parte, legítima, cultural y emocionalmente.

-¿Hay en todo caso una explicación para que aumente en más del doble el crecimiento de censados en Cuba, lo haga en Argentina y sin embargo caiga en otros países sudamericanos o en toda Europa?

-Del millón y medio de españoles en el exterior, la mayoría están en América del Sur y especialmente en Argentina, por eso saltan siempre cifras muy elevadas. En Cuba creo que se dan otras razones que tienen que ver con la situación del colectivo en el país. En la actualidad el movimiento de personas se debe más a circunstancias temporales vinculadas a la expansión empresarial, actividades oficiales, cooperación, estudios, y, en menor medida, de expectativas de empleo en el lugar de destino. Es una consecuencia más de la globalización.

-La delegación de la Xunta en Buenos Aires acaba de cumplir un año. ¿Cuál es la principal preocupación que le trasladó la emigración gallega en este tiempo?

-Demandan un mejor conocimiento allá de lo que somos aquí, y, en consecuencia, respeto y comprensión. Hay un exceso de paternalismo y eurocentrismo en la visión que se da de los emigrantes gallegos y es arrogante decir que nuestros emigrantes son fácilmente manipulables políticamente o que solo les interesa ser reconocidos como gallegos porque buscan beneficios; es, como mínimo, agraviante y denota una actitud arrogante y desconocedora de la realidad.