El conselleiro de Presidencia, José Luis Méndez Romeu, levantó ayer la voz contra la ausencia masiva de diputados de las sesión plenaria del Parlamento, calificando de «espectáculo lamentable» y «pouco edificante» que se tenga que celebrar una comparecencia cuando unos 60 de los 75 escaños del hemiciclo estaban sin ocupar.
Pese a que la presidenta de la Cámara, Dolores Villarino, concedió un cuarto de hora de gracia para que se fueran incorporando sus señorías, tras ese paréntesis solo se contabilizaban cuatro personas en las filas del PP y una decena más en los grupos del bipartito. Méndez, que sin duda es el miembro del Gobierno que más sesiones parlamentarias se mete entre pecho y espalda, aprovechó su subida a la tribuna para protestar por estas ausencias, dirigiéndose especialmente al flanco que ocupa el PP, y recordando que la ciudadanía «está a manter cos seus impostos», dijo, la dedicación exclusiva de los diputados. Cada electo gana mensualmente un mínimo de 4.200 euros brutos.