La víctima notó que la habían seguido una semana antes

La Voz

GALICIA

19 mar 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Una semana antes de su secuestro, Jesús Ovidio Domínguez ya había percibido que algo no marchaba bien. Notó que un coche lo seguía de noche tras salir de su trabajo. Solo desapareció del espejo retrovisor cuando llamó a la policía y los agentes hicieron acto de presencia.

Finalmente, los secuestradores lograron su objetivo y se lo llevaron cuando se encontraba solo en su empresa, la céntrica pastelería Ris. Su mujer dio la voz de alarma cuando no regresó a casa. Al día siguiente la policía encontró su coche abandonado y se confirmó la veracidad del secuestro. La pesadilla duró 15 días. Desde ayer, Jesús Ovidio Domínguez descansa en su casa.