Rajoy acusa a Zapatero de «tirar de chequera» para ocultar su «fracaso» en política territorial y en la negociación con ETA
25 oct 2007 . Actualizado a las 04:38 h.El Gobierno salvó ayer el primer trámite parlamentario de los Presupuestos Generales del Estado gracias al apoyo del PNV, el BNG, la Chunta Aragonesista de Labordeta y de dos tránsfugas, Joaquín Calomarde, que ganó su escaño en las filas del PP, y Román Rodríguez, en las de Coalición Canaria. Al final, la votación en el Congreso no estuvo tan reñida como se esperaba, ya que los socialistas se aseguraron el voto de sus dos diputados verdes y se aprovecharon de la ausencia de diputados populares. Las seis enmiendas a la totalidad, presentadas por el PP, CiU, ERC, IU-ICV, Coalición Canaria y EA, fueron rechazadas por 177 votos en contra, incluido el de un diputado del PP por equivocación, 168 a favor y una abstención, de un parlamentario de Iniciativa, disconforme con la posición de IU.
La proximidad de las elecciones hizo que los socios preferentes de Zapatero durante toda la legislatura, ERC e IU, le negaran en esta ocasión su apoyo, en busca de marcar distancias de cara a la cita en las urnas.
«Estos cuatro años han sido la legislatura con mejores resultados de nuestra historia democrática». De esta forma comenzó Pedro Solbes su defensa de las cuentas públicas y señaló que aunque la economía no crezca al 3,3%, como está previsto, lo haría al 3%, en todo caso más de lo que lo hacía cuando el PSOE accedió al poder.
Muy crítico, Mariano Rajoy calificó los Presupuestos de electoralistas y dijo que suponen «un freno en lo económico, un retroceso en lo político y una indecencia por el uso partidista del dinero de todos los españoles». El líder del PP señaló que, «fracasadas las dos líneas de actuación emblemáticas» de Zapatero, -la reconfiguración territorial y la negociación con ETA-, y «a falta de un proyecto ilusionante», «tira de chequera para ocultar su fracaso político». «Necesita tantas cortinas de humo para disimular lo que ha hecho en estos tres años y medio que no hay presupuestos que lo aguanten», añadió. Asimismo, señaló que las cuentas marcan la existencia de «dos Españas», con «ciudadanos de primer y de segunda». Solbes le respondió que frente a esa «visión apocalíptica» prefería centrarse en los números.
No cumple con Cataluña
Josep Antoni Duran i Lleida dijo que el motivo fundamental de la enmienda a la totalidad de CiU era que los los Presupuestos «no cumplen con Cataluña». Solbes le respondió que el Gobierno había sido «enormemente generoso» al aceptar un concepto amplio de infraestructuras, como reclamaban los partidos nacionalistas. Esto provocó la ira del portavoz de CiU, que señaló que eso nadie lo iba a entender en Cataluña dado el caos existente y que ese tipo de declaraciones aumentaban la «desafección» de la sociedad catalana.
Joan Puig, portavoz de ERC, rechazó las cuentas por no garantizar las inversiones en Cataluña y no cumplir con «la demanda histórica» de publicar las balanzas fiscales, que según las cuentas de ERC, reflejarían un desequilibrio negativo de 19.000 millones de euros anuales para Cataluña. Para Puig, los Presupuestos prevén una inversión real del 14,9%, «lejos del 18,72% que estipula el estatuto catalán».
Gaspar Llamazares explicó que su rechazo se debía a la falta de «ambición social y medioambiental» de las cuentas públicas y reclamó un «giro a la izquierda» al Gobierno.
La diputada de Coalición Canaria Ana Oramas argumentó que los Presupuestos son «injustos e insolidarios con Canarias».