Alemania solo apoya la compra de bonos por el BCE, que estudia ampliar capital para seguir haciéndolo
ECONOMÍA
España pedirá en el Consejo Europeo un incremento del fondo de rescate para que pueda adquirir deuda
15 dic 2010 . Actualizado a las 02:00 h.La canciller alemana, Angela Merkel, llegará al Consejo Europeo de Bruselas, que se celebra mañana y pasado en la capital europea, con sensación de seguridad, pisando firme, y con tres nein (no) en la maleta como arma de disuasión. La agenda que Alemania llevará a la cumbre se centra en el rechazo a la creación de eurobonos, que no se excluya (y quede por escrito) la participación de bancos privados en futuros rescates y la negativa a ampliar la cuantía del fondo de rescate al euro.
Tres nein que, de acuerdo con Berlín, deben integrar la batería de medidas indispensable para apuntalar el vigor de la moneda única, el euro, y garantizar su supervivencia en medio de las múltiples turbulencias que ha padecido en lo que va de año, desde la implosión de las crisis griega e irlandesa.
Aunque la «mujer más poderosa de Europa», según la revista Forbes , asegura que «el euro no está al borde del abismo», la realidad es que con dos rescates a la espalda (Grecia en mayo e Irlanda en noviembre) los 16 socios de la eurozona y los 27 miembros del bloque no pueden pavonearse demasiado. Por ello, el objetivo que se han fijado los jefes de Estado y Gobierno de la Unión es apuntalar al euro, blindarlo, e intentar evitar que vuelva a sufrir los vaivenes abruptos típicos de una montaña rusa, y eso a pesar de que la UE tiene una política monetaria común, una de sus fortalezas, pero 27 políticas fiscales diversas, una de sus debilidades, según los expertos.
En ese sentido, según se afirma en el borrador de la declaración final del próximo Consejo, al igual que se ha hecho con los planes de salvamento de Grecia e Irlanda, el bloque seguirá actuando con decisión allí donde haga falta para garantizar la estabilidad de la moneda, nacida en 1999.
Entre los puntos que se tratarán en Bruselas figuran posibles cambios en el Tratado de Lisboa, que permitan convertir en permanente el fondo de estabilidad para el euro, dotado con 750.000 millones de euros, que teóricamente vence en el 2013, pero que se transformará en permanente. Pero esos cambios, se afirma, solo se podrían realizar «bajo estrictas condiciones y sin que ello suponga la celebración de referendos en los Estados miembro», lo cual equivaldría a reabrir una delicada «caja de Pandora» institucional.
España, por su parte, defiende una ampliación del fondo de rescate, dotado ahora con 750.000 millones, para que pueda comprar bonos y conceder créditos a corto plazo.
De lo que sí es partidaria Merkel es de que el BCE adquiera, como ya lo está haciendo, deuda de los países en apuros. En este sentido, la autoridad monetaria estudia llevar a cabo una ampliación de capital para cubrir las pérdidas que estas operaciones le puedan causar.