Zapatero dice que dialogará con los sindicatos tras la huelga general, pero defiende la reforma laboral
ECONOMÍA
El presidente del Gobierno aseguró ayer en Zaragoza que tras la huelga general del próximo miércoles mantendrá el diálogo y la concertación con los sindicatos para lograr reducir el desempleo, a la vez que apeló a su responsabilidad para que planteen propuestas con ese objetivo, si bien ha recalcado su defensa de la reforma laboral ya aprobada.
Durante un encuentro del PSOE en la capital maña, Zapatero aludió a la huelga general, defendiendo la reforma laboral. Pese a las críticas recibidas por parte de los sindicatos, aseguró que mantendrá el objetivo del diálogo social más allá de ese paro porque hay muchos cambios que hacer en el ámbito laboral, social y en el sistema de pensiones que aconsejan la máxima capacidad de concertación.
«Como presidente del Gobierno, os puedo asegurar que volcaré todos mis esfuerzos para tener ese diálogo con los sindicatos y con la patronal», recalcó.
El jefe del Ejecutivo hizo un llamamiento a la responsabilidad para salir de la crisis y para crear expectativas de empleo y, por ello, instó a las centrales a que planteen iniciativas. «Eso es lo que el Gobierno quiere compartir, y está dispuesto a hacer el máximo esfuerzo de diálogo», insistió.
Zapatero reiteró su respeto a la decisión de las centrales sindicales de convocar una huelga general, pero introdujo una justificación: «Tienen derecho a la huelga, ¡solo faltaría! Pero el Gobierno debe intentar cambiar las cosas para generar más empleo».
El socialista aprovechó la cita para recordar las principales decisiones adoptadas durante sus mandato en materia de política social, con un incremento, aseguró, de un 40% en gasto social, mejora de las pensiones, del salario mínimo y de las becas, las ayudas para el alquiler y la puesta en marcha de la ley de dependencia.