Andalucía y Extremadura también subirán el IRPF a las rentas altas y establecerán un impuesto para la banca
ECONOMÍA
Después de Cataluña, Asturias y Baleares, Andalucía y Extremadura se sumaron ayer al carro de las autonomías que han decidido incrementar la fiscalidad de los que más ganan.? El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, anunció el mayor ajuste económico en la historia de la región, un tijeretazo con el que se pretenden ahorrar 1.583 millones de euros. La medida más rotunda pasa por gravar desde el próximo año a las rentas más altas, consideradas estas a partir de los 80.000 euros. Entre esta cifra y los 100.000 euros, los afectados tributarán desde enero del 2011 un 22,5%, un punto más que hasta ahora, mientras que para bases de entre 100.000 y 120.000 euros el incremento será de dos puntos, situándose el tipo en el 23,5%. Los ingresos superiores a los 120.000 euros tributarán al 24,5%, tres puntos más que ahora. La Junta de Andalucía prevé que el incremento afectará a 21.000 contribuyentes y se recaudarán 30 millones.
En el caso de Extremadura, el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, anunció que el tramo autonómico del IRPF se incrementará en un 0,5% para rentas superiores a 60.000 euros; un 1% para rentas de más de 80.000 euros; y un 2% para las que superan los 100.000 euros; mientras que para las de más de 120.000 euros aumentará un 3%, pasando en este caso del 43 actual al 46%, informa Efe.
Fiscalidad verde.
Andalucía promueve además un impuesto verde de 10 céntimos a las bolsas de plástico de un solo uso, e implantará el denominado céntimo sanitario, es decir, el tramo autonómico del impuesto sobre ventas minoristas de determinados hidrocarburos. Extremadura, por su parte, incrementará el impuesto energético a las compañías eléctricas, que afectará a las grandes centrales hidroeléctricas y que se equipará con lo establecido para la energía nuclear. También hará uso del céntimo sanitario en materia de combustible, lo que no afectará a los profesionales del transporte ni a los del sector agrícola, y que supondrá una subida de dos céntimos en el precio del gasoil y de 2,4, en el de la gasolina.? Depósitos bancarios. El sector financiero también tendrá que apretarse el cinturón y «contribuir al esfuerzo que estamos pidiendo a todos», aseguró ayer Griñán en su primer debate sobre el estado de la comunidad como presidente. Para conseguir que el dinero fluya, el jefe del Ejecutivo andaluz anunció un nuevo impuesto financiero sobre los depósitos acumulados en las entidades de crédito situadas en la comunidad, aunque la sede jurídica o social esté en otra región. Esta nueva tasa gravará entre un 0,3 y un 0,5% el stock de las entidades bancarias a partir de los 150 millones de euros. Eso sí, se podrán deducir los créditos para proyectos públicos o privados enmarcados en el Plan Andalucía Sostenible y la labor de las obras sociales.
Fernández Vara, por su parte, anunció ayer que su Gobierno ha decidido incrementar en un 15% el impuesto que aplica a los depósitos bancarios