«Los bancos españoles son sólidos, pero puede ocurrir cualquier cosa»

ECONOMÍA

Rojo considera que la crisis durará, como mucho, un año y medio en todo el mundo, pero entiende que se alargará en España por la influencia del factor inmobiliario

19 oct 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Gobernador del Banco de España entre 1992 y el 2000, vicepresidente del Instituto Monetario Europeo, germen del actual Banco Central Europeo, de 1994 a 1998, Luis Ángel Rojo, de 74 años, es uno de los expertos más autorizados para opinar sobre una crisis que ya vaticinó ahora hace dos años. Este académico de la lengua española está considerado el artífice de la actual solidez del sistema bancario español y un maestro de toda una generación de economistas. Rojo no descarta ningún escenario, pero cree que la crisis durará como máximo un año y medio, y algo más en España.

«No podemos estar absolutamente seguros de que al sistema financiero español no le va a pasar nada, porque hoy en día todos están amenazados, pero no hay ninguna razón para temer que así sea», afirma Rojo, que asegura que recibe muchas llamadas de teléfono de amigos para consultarle qué tienen que hacer con sus ahorros. «Les digo que no se pongan nerviosos ni corran a sacar su dinero del banco o a llevárselo a otro. El sistema español es solvente y después de las medidas del Gobierno, más que antes».

-Usted advirtió ya en el 2006 que habría una recesión en España vinculada al pinchazo inmobiliario en EE.?UU. en uno o dos años. Acertó de pleno.

-Sí, era muy fácil saberlo.

-Pero sus palabras cayeron en saco roto.

-No me hicieron caso, pero era fácil prever que la burbuja inmobiliaria de EE.?UU. acabaría pinchando. Yo no soy un profeta, pero tampoco hacía falta ser un adivino. Realmente eso se veía venir aquí y en otros países, en Estados Unidos, por ejemplo. Yo estaba convencido de que la crisis estaba al caer.

-Es decir, que se podrían haber tomado medidas preventivas para paliarla.

-Sí, pero no solo en España, en Estados Unidos y en Europa. Era una cuestión colectiva.

-Aunque usted vaticinó la crisis, ¿creía que sería tan rápida y tan profunda?

-Tan rápida como está siendo sí, pero no pensaba que sería tan profunda. Desde luego ha superado cualquier previsión.

-¿Necesitan los bancos españoles que el Estado entre en ellos como accionista?

-Yo creo que no hace ninguna falta.

-A usted se le considera el artífice de que el sistema financiero español sea uno de los más sólidos del mundo.

-Fui uno de los que contribuyeron seriamente a ello.

-¿Y por qué es más sólido que el de otros países?

-Porque tiene una muy buena supervisión y luego, por otra parte, porque desde hace bastantes años se ha procurado que los bancos españoles sean prudentes y no cometan graves fechorías en la toma de riesgos. También reforzamos las reservas de los bancos ante posibles problemas. Todo eso es lo que ha hecho que el sistema sea realmente sólido.

-¿Qué le parecen las medidas del Gobierno para respaldar el sistema financiero?

-Me parecen bien, creo que están bien orientadas, van en la buena dirección. Lo que me parece muy importante es que por fin se hayan tomado medidas aquí, en Europa y en Estados Unidos. Si los Gobiernos, empezando por el norteamericano, las hubieran tomado a tiempo, no habría pasado lo que ha pasado. Creo que poco a poco el público irá recobrando la confianza, que es lo más importante ahora. En una situación de crisis esperar es muy malo.

-¿Puede asegurar categóricamente que los bancos españoles son solventes?

-Son sólidos, pero puede ocurrir cualquier cosa. Tal y como está el mundo en este momento, que se levanta uno por la mañana con unas noticias y por la noche han cambiado las cosas, no se sabe lo que va a pasar, pero el sistema español es un sistema muy sólido en este momento y no hay ninguna razón para pensar que haya quiebras o ruinas cercanas, o que se produzca una catástrofe.

-Muchos se preguntan que, si esto es así, por qué el Gobierno ha tomado medidas.

-Nadie sabe nunca lo que va a pasar. No es solo algo de ahora. En una situación como esta, tomar medidas de precaución es lo lógico.

-Usted acudió al Banco Central Europeo a proponer que adoptara el sistema español y tampoco le hicieron caso.

-No me hicieron caso, no le prestaron demasiada atención. Les pareció que era innecesario, dijeron que era una tontería. Y ahora ya hemos visto las consecuencias.

-¿La crisis puede ir a peor?

-Todo puede ir a peor, pero creo que las cosas van a mejorar poco a poco, aunque también pueden ir a peor, evidentemente.

-¿Cuándo empezaremos a vislumbrar el final de la crisis?

-En el mundo en general, en Europa y Estados Unidos yo calculo que la crisis va a acabar dentro de un año o de un año y medio. Pero en España, como tenemos un problema de crisis inmobiliaria, que son crisis largas, durará más.

-¿Cuánto más?

-Eso no lo sé.