El Plan de Competitividade 2008-2011, en manos ya de sindicatos y patronal para ser mejorado, construye otra Galicia sobre pilares conocidos como la innovación
18 may 2008 . Actualizado a las 02:00 h.Durante el último decenio, en el ámbito académico y financiero se ha alertado en muchas ocasiones sobre la necesidad de que Galicia cambie un modelo productivo que pivota en exceso sobre sectores de menor valor añadido -construcción y servicios - y en el que las empresas se mueven mayoritariamente en mercados locales en base a una competencia de costes.
En el 2005, tras su llegada al Gobierno, el bipartito hizo suya aquella vieja reivindicación hasta el punto de convertirla en objetivo prioritario de su gestión. En el tramo final de la legislatura, la Xunta ha presentado su propuesta a los agentes sociales bajo el título Plan de Competitividade 2008-2011. Sindicatos y patronal definen estos días las alegaciones que harán para mejorar un documento que se aprobará en el proceso de diálogo social. El presidente Touriño quiere el máximo consenso posible para una estrategia que lidera en exclusiva la pata socialista del bipartito y cuyo objetivo es cambiar el modelo productivo del país. La proximidad de las elecciones autonómicas ha empujado a todas las partes a acelerar el proceso para disipar cualquier lectura de tinte electoralista.
El documento sobre competitividad que obra en poder de los agentes sociales y que les remitió la Xunta lo ha elaborado una consultora de Madrid. En él se hace un detallado análisis sobre la situación gallega -con datos de sobra conocidos- y se plantean, como principales novedades, cinco ejes prioritarios de acción: desarrollo y modernización empresarial; demografía; innovación; infraestructuras y eficiencia de la Administración pública. De las propuestas de la Xunta destaca la necesidad de corregir el declive demográfico y la urgencia de atraer importantes contingentes de inmigrantes para mejorar la productividad y el crecimiento. También plantea novedades en el ámbito de las infraestructuras, como potenciar los puertos para impulsar la competitividad gallega.
El documento dedica a la innovación un amplio espacio y se le atribuye una importancia capital para situar a Galicia en la senda del progreso y la economía del conocimiento. La propuesta incluye la necesidad de fortalecer el sistema gallego de I+D y de incentivar la innovación en el sector privado.
El plan define prolijamente los objetivos para alcanzar la competitividad, pero no se prodiga en los detalles concretos, es decir, en los presupuestos y los plazos para lograr esas metas. El Gobierno autónomo sostiene que se trata de un borrador de trabajo, que será objeto de mejora, y los agentes sociales lo consideran excesivamente generalista.