Martinsa-Fadesa ha avanzado un paso más en su política de desinversión en activos no estratégicos con la venta de Diana Forest, la fábrica de madera que poseía en Rumanía, por 23 millones de euros.
El comprador, la empresa polaca Barlinek, se ha comprometido a mantener el empleo de una parte importante de las 1.400 personas que integran la plantilla de la factoría rumana, según señaló ayer la inmobiliaria gallega en un comunicado.? Diana Forest fabrica puertas y suelos en haya, así como otros accesorios de madera empleados habitualmente en el sector inmobiliario. La planta, situada en la región de Moldavia, al nordeste del país, fue adquirida por Fadesa en 1998.
Detrás de la decisión de la empresa que preside Fernando Martín se encuentra no solo estrategia de la firma de deshacerse de todos aquellos activos que no se engloban en el negocio puramente inmobiliaria, sino también el hecho de que la planta rumana arrojaba unas pérdidas anuales cercanas a los 13 millones de euros.