La Federación Española de Fútbol decidió ayer aplazar la resolución del pasado viernes en la que retiraba las licencias a José Luis Oltra y su ayudante, Chema Sanz, y les impedía sentarse estar tarde en el banquillo de Riazor en el partido del Deportivo frente al Hércules.
Un día después de suspender las fichas de los entrenadores (al no haber pagado el Deportivo la deuda de 390.000 euros más intereses que mantiene con el Vecindario) se las ha devuelto, como medida excepcional, una vez que el club coruñés depositó un aval de 200.000 euros en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid. Esa es la cantidad que había exigido el TSJM el pasado día 25 para mantener las medidas cautelares y permitir a los técnicos ejercer y alinearse a los jugadores incorporados este año o que han renovado su contrato. Para ello, dio de plazo hasta el martes y, tras pedir el club coruñés que se ampliara dicho plazo y ofrecer garantías de cobro sobre derechos de la Liga, el alto tribunal emitió una providencia en la que no aceptaba ninguna de sus solicitudes y levantaba las medidas cautelares.
De nuevo al TSJM
Ahora, tras esta nueva decisión, habrá que aguardar el dictamen del TSJM sobre la presentación del aval por parte del club coruñés y saber si lo acepta. En caso negativo, la federación volverá a retirar la licencia de los entrenadores y a pedir a la Liga de Fútbol Profesional que haga lo propio con las de los futbolistas.
En este caso, el Deportivo tendría apenas tres días de plazo para llegar a un acuerdo con el Vecindario, toda vez que el próximo compromiso será el miércoles a las ocho de la tarde en Riazor frente al Girona, en el encuentro correspondiente a la ida de la segunda ronda de la Copa del Rey.