Los vigueses lograron en dos de sus ascensos la marca de siete triunfos consecutivos y ahora con cuatro, ya han cogido el paso de un equipo enrachado hacia la cumbre
28 sep 2010 . Actualizado a las 02:00 h.El Celta sumó el pasado domingo la cuarta victoria consecutiva tras vencer al Nàstic (1-0), y haberlo hecho con anterioridad frente al Numancia (1-3), Córdoba (3-2) y Tenerife (0-2). Esta racha se ha convertido en la mejor del equipo vigués desde que descendió a Segunda hace más de tres años, solo igualada en la temporada 2008-2009 con Pepe Murcia en el banquillo. Ahora los celestes tienen ante sí la posibilidad de tomar el camino del récord de triunfos seguidos en la historia del club que está en siete partidos ganados consecutivamente.
Desde su fundación en 1929, el equipo vigués solo logró encadenar dos rachas de siete victorias seguidas. Ambas han sido en Segunda División, y se produjeron en dos temporadas en las que el Celta logró el ascenso de categoría, lo que supone un paralelismo esperanzador para los intereses célticos.
La última vez que esto sucedió fue en la temporada 2004-2005, la del último ascenso con Fernando Vázquez en el banquillo. Los vigueses lograron ganar siete partidos lo que les catapultó a la primera plaza del campeonato. En esas siete victorias hicieron doce goles y encajaron dos. La visita del Cádiz a Balaídos, otro de los equipos que al final ascendió, truncó con una derrota esta exitosa racha. De esa campaña el único superviviente en la plantilla celeste es Borja Oubiña.
La primera serie tan triunfal fue la de la temporada 1981-1982. Entonces los célticos estaban dirigidos por Milorad Pavic y se proclamaron campeones de la categoría. Sus números fueron espectaculares ya que sumó veintiseis tantos a favor, y solo recibió ocho. Aquel era un equipo que practicaba un 4-3-3 y un gran fútbol de ataque. Tenía en sus filas a Lucas, que fue Pichichi con 27 goles, y a Maté, Del Cura, y los vigueses Antonio Gómez o Suárez. Curiosamente su racha la cortó un equipo que perdió la categoría, el Almería, con un contundente 4-0 en terreno andaluz.
Para igualar esta racha el Celta debe vencer esta semana en su visita al Huesca, la próxima en Balaídos al Alcorcón, y el último fin de semana de octubre en su enfrentamiento con el Recreativo de Huelva en el Nuevo Colombino. Dos de estos tres rivales, sorianos y onubensen, ocupan posiciones de descenso, mientras que los madrileños son décimos.
La última serie de cinco triunfos consecutivos se produjo en la temporada 2000-2001 en Primera con Víctor Fernández al frente del Celta. Los vigueses habían vencido al Oviedo (1-0), Valladolid (1-2), Valencia (3-2), Málaga (1-4) y Athletic (2-1). El Santander la cortó con un 3-0. El Celta terminó sexto.