Los granates, tras una gran exhibición de Igor, se impusieron con soltura y se jugarán la promoción el domingo
03 may 2010 . Actualizado a las 02:00 h.El Pontevedra se juega el domingo en Mendizorroza la clasificación para la fase de ascenso a Segunda División frente a un Alavés que, con muchos apuros, ha conseguido imponerse al Celta B en el campo de Barreiro. Mientras el equipo granate dio la talla ante el Lemona a la espera del próximo domingo en el que ambos ambos equipos se verán las caras en Mendizorroza para dilucidar cual accede a la promoción de ascenso.
Consciente de la victoria del Alavés ante el Celta B en el campo vigués de Barreiro, el Pontevedra afrontó el encuentro contra el Lemona sabiendo que solo la victoria mantendría sus opciones de victoria en la lucha por el ascenso.
Con el paso de los minutos, Igor, que empezó jugando como media punta dispuesto a distribuir el juego. Y aunque no es su puesto, el brasileño consiguió meter un balón magnífico a Iban Espadas, quien en la línea de fondo buscó a Gerardo en el poste contrario, aunque no acertó a batir a Alcalde, quien en el minuto 31 sacó las telarañas de la portería de fondo sur con una excelente intervención que podría firmar Casillas en sus buenos tiempos.
A diez minutos del descanso, Igor dio otra pincelada de su extraordinaria calidad. Tras irse de cuatro jugadores del Lemona en el área pequeña, el balón llega a Iván Malón, quien mete el esférico a Espadas y completa la acción Víctor Bravo bajo los palos con una de sus excelencias: taconazo por detrás que desconcierta a Alcalde y el balón llega al fondo de las mallas.
El Lemona trata de reaccionar tras encajar el primer tanto y llega con claridad con un par de ocasiones. La mejor, sin duda, la de Lambarri, que llegó franco a la portería de Orlando Quintana. El conjunto vasco, que mantuvo durante muchos minutos su estilo, con una intensa presión en la zona central y con muchos jugadores por detrás del balón, estuvo en los últimos minutos de la primera parte una gran ocasión. El meta granate controló los nervios cuando vio a Lambarri de frente y este no supo por dónde colar el balón.
Tras el descanso, Pablo Alfaro mandó a calentar a Sergio Castaño, Moreno y el canterano Rubén García para dosificar a los futbolistas más castigados.
Mientras, el Lemona seguía buscando la portería local y en un córner que remató Lambarri y el esférico volvió a tocar la escuadra derecha de la portería de Quintana, aunque el orden defensivo del Pontevedra lo aprovechó para montar un par de contras con mucha intención, aunque el Lemona no estaba dispuesto a bajar la guardia aunque lo mejor todavía estaba por llegar.
Igor puso en pie a la afición con una jugada de tiralíneas. Aguantó a su par en dos ocasiones, le mostró el balón por la izquierda, se giró al lado contrario y volvió a mostrarle el balón a Alcalde, para colcarle el balón muy cerca de él. Fue una buena jornada para los granates.