Riki, Guardado y Pablo Álvarez regresarán a la alineación inicial el próximo sábado frente al Xerez
17 feb 2010 . Actualizado a las 04:13 h.Tras la preocupación por la mala imagen ofrecida frente al Espanyol, llega la hora del análisis y las soluciones. Lotina anunció ayer hasta cuatro cambios en el once del Dépor, que se enfrentará el sábado a las seis de la tarde (televisado por Canal Plus Liga y Gol Televisión) al Xerez. Se da por seguro que Guardado, Riki y Pablo Álvarez saltarán de inicio al césped de Riazor, pero es que, además, el técnico medita dar la titularidad a Juan Domínguez en el mediocentro tras su buena actuación del domingo.
«Lo lógico es que Guardado vuelva al equipo, luego tenemos a Riki, que lleva dos semanas (jugando), Pablo Álvarez... Es lo lógico, aunque todavía no tengo la decisión tomada, porque quiero ver el entrenamiento de mañana», reveló el técnico. El mexicano, piedra angular de sus esquemas, y el madrileño, el delantero en que más confía esta temporada, partieron en la última jornada desde el banquillo como fase final de su completa reintegración al equipo después de sus respectivas lesiones. Álvarez, titular en las cinco últimas jornadas, se perdió el partido a causa de su expulsión en Málaga.
Estos cambios responden a la intención de Lotina de que el Dépor recupere su juego. «Nos falta fútbol, pero el problema no son las bajas y sí que tenemos que individualizar y dar más todos de nosotros mismos. En Barcelona hemos perdido todas las cosas sencillas que en la primera vuelta hacíamos bien y ahora no», afirmó. El entrenador vasco aparcó ayer su alarmante discurso pospartido y reveló que en la charla previa al entrenamiento de ayer también trató de aportar sosiego a la situación que atraviesa su equipo. «El otro día estaba preocupado y sigo preocupado. Se puede perder, pero no cómo lo hicimos. En Valladolid caímos por 4-0 y estaba menos preocupado que el domingo, que fue por 2-0. Tenemos que trabajar para corregir lo que hicimos mal, pero también miro la clasificación y somos sextos. ¿Y eso quiere decir que no pasa nada? No, tengo que mirarme a mí mismo y dejarme de pamplinas, sí que pasa. Hay que jugar más al fútbol y eso con trabajo se corrige. Hoy (por ayer), después del entrenamiento, estoy más animado», añadió.
Altas
Lotina explicó que le gustó el rendimiento de Guardado, a quien ya consideraba completamente recuperado, aunque finalmente solo disputase la media hora final del choque. «Él estaba bien, pero no le pusimos (de inicio) porque como se me caiga ya no duermo ni la siesta. Fue por precaución. A Riki, en cambio, le costaba más recuperar la forma, pero hoy (por ayer) lo he visto mejor y más suelto», señaló.
Con estas novedades, así como la posible inclusión de Juan Domínguez en el mediocentro, el sábado la fisonomía del Dépor cambiará sustancialmente respecto a sus últimas jornadas. Según los planes del entrenador, el canterano y Juca llevarán la batuta del juego en el centro del campo, apoyados por el trabajo de Guardado en la izquierda y la llegada de Juan Rodríguez en la derecha. Pablo Álvarez, de nuevo como mediapunta, y Riki tratarán de cambiar la sequía goleadora de su equipo, en el que lo único que está previsto que no varíe será la retaguardia, formada por Aranzubia, Manuel Pablo, Colotto, Lopo y Laure.