Por si no había quedado claro durante la primera vuelta que el Lugo se encuentra muy a gusto en su viaje por las nubes, en el arranque de la segunda, en el primer examen duro de la serie que debe enfrentar en este inicio de 2010, mostró que juega a por nota. Y el sobresaliente comienza a quedársele corto. Sumó su quinta victoria consecutiva con un fútbol control que minimiza riesgos, mantuvo una vez más la portería a cero y, en esta ocasión, sacándole la máxima rentabilidad a sus ocasiones de gol.
Si el Palencia aparecía por encima en la clasificación antes de comenzar el encuentro, no le quedó más remedio a los rojiblancos que constatar desde el pitido inicial su superioridad. En diez minutos ya ganaban por un gol de ventaja, rondaban con peligro constante la portería de Rebollo y su rival no encontraba tapones para tantas vías de agua que le hacían los de Setién. Los castellanos parecían un equipo de niños, incapaces casi de correr tras el balón que los locales movían de forma vertiginosa. Cuando querían, los rojiblancos ponían una marcha más, al ritmo que escogían sus directores de orquesta: Marcos, impecable todo el partido y Seoane, que en la segunda mitad, por la lesión de Cristóbal, terminó de lateral izquierdo.
Si como casi siempre, los dos mediocentros impusieron su ley en el eje, Tornero, en vena goleadora, agrandó el espacio que le dejó en la banda derecha el conjunto visitante. Si a su buen momento se le añade la confianza que ha adquirido Noguerol en la titularidad y la capacidad del ourensano de driblar a cuanto defensa se le puso en medio (acabó convertido en un pimpampum, de las patadas que recibió), el resultado de su conexión, un trallazo a la escuadra del valenciano que suponía el 1-0, no era de extrañar.
El Lugo llegó con facilidad al área rival, pero no tiró tanto como otras veces. Quizás quería que todos sus remates limpiaran telarañas. Así, Losada, que en la segunda mitad sí apareció, se guisó él solo un chupinazo imparable en la escuadra. El 2-0, partido sentenciado y, por si las moscas, Alberto García marcaba el 3-0 en el descuento.