14 dic 2009 . Actualizado a las 02:00 h.
El 3 de diciembre del 2005 saltaban las alarmas en la selección española. Xavi sufría una lesión de ligamentos durante un entrenamiento con el Barça y los médicos le auguraban seis meses de baja. Demasiado tiempo para poder contar con el jugador en el Mundial de Alemania.
Sin embargo, el centrocampista apuró los plazos de su recuperación y ya en abril del 2006 el propio futbolista aseguraba que llegaría en condiciones a la cita mundialista.
La similitud en fechas de lesión y plazos marcados para la recuperación suponen un precedente para el optimismo luso.