Ecclestone intercede por McLaren y pide un «castigo suave» a la FIA

José Carlos J. Carabias? / ?DPA

DEPORTES

Cada vez hay más indicios de que Hamilton y su equipo no serán sancionados con dureza por mentir en Australia

28 abr 2009 . Actualizado a las 12:20 h.

Lewis Hamilton se declaró feliz por su cuarto puesto en Bahréin después de un aciago comienzo de temporada y en McLaren secundaron la opinión del actual campeón del mundo. «Estoy encantado, porque Button era mucho más veloz en las curvas rápidas». El día después, en el equipo inglés casi nadie quiso hablar del juicio al que será sometida la escudería mañana París por el caso de las mentiras de Australia. Martin Whitmarsh, el nuevo hombre fuerte, ha enviado una carta a la Federación Internacional (FIA) pidiendo clemencia y hay signos de que ha surtido efecto. Bernie Ecclestone, el dueño del negocio, ha intercedido a favor del equipo británico.

Cada vez hay más síntomas de que la FIA no castigará con dureza a McLaren o a Hamilton por mentir a los comisarios en una maniobra con Jarno Trulli en Melbourne, que le costó la descalificación al campeón del mundo. El pasado fin de semana, en el desierto de Bahréin, Ecclestone recomendó al Consejo Mundial de la FIA -del que él es miembro- una sanción suave para McLaren. Hace un año y medio, y por aquel suceso de espionaje a Ferrari en el que los correos electrónicos de Fernando Alonso jugaron un papel clave, la FIA multó a McLaren con 72 millones, un castigo económico sin precedentes en la fórmula 1.

Las especulaciones se habían desatado hasta tal punto que hasta se hablaba de una sanción dura para Hamilton -dos o tres carreras de suspensión-, lo que daría al español Pedro Martínez de la Rosa la oportunidad de pilotar en el circuito de Montmeló.

Pero ahora en este circo del motor casi todos descartan que se aplique un castigo ejemplar. Y más después de la sugerencia de Ecclestone, que se apoya en otra amenaza, la de Mercedes, socio de McLaren.

Mercedes, en el aire

El presidente de Daimler AG (el holding en el que se integra Mercedes), Dieter Zetsche, consideró el pasado fin de semana la posibilidad de abandonar la fórmula 1 si la FIA castiga a McLaren con la retirada del Mundial o algo similar. «Si las circunstancias cambiasen por una resolución irresponsable de la FIA, tal vez también nosotros consideraríamos cambios», dijo Zetsche a la revista alemana Focus .

Daimler posee el 30% de las acciones de McLaren. Con sus declaraciones, Ecclestone salió a echar un capote a la marca alemana en un juego político y de influencias. Nada nuevo en este deporte. Se trata también de saber quién manda más en otro pulso entre Ecclestone y Mosley.

Hamilton ya pidió perdón en el Gran Premio de Malasia «por su error». Además, McLaren retiró definitivamente de la circulación a su mandamás Ron Dennis, enemigo acérrimo de Mosley, aunque este adiós ya había sido anunciado con anterioridad. Se llegó a escribir que Dennis mandó mensajes telefónicos a sus empleados y pilotos para exigirles que no contaran la verdad y ocultaran que hubo una orden de equipo para que Hamilton dejara pasar a Trulli en Australia. Pero altos responsables de McLaren negaron con sorna que el ex jefe hubiese enviado un total de ochenta mensajes.

El nuevo jefe, Martín Whitmarsh, pidió clemencia a la FIA mediante una carta. Ahora Ecclestone también media a su favor. Son demasiados signos para pensar que Hamilton no vaya a correr en el circuito de Barcelona.