El Fabril encajó cuarto goles, pero pudieron ser muchos mas, en el que su técnico tito Ramallo consideró el peor partido de la temporada. Y es que los gallegos no dieron la talla ante un Real Unión que jugó a sus anchas y al que sólo su propia relajación (ya con el 4-1 en el marcador) impidió haber firmado una goleada de escándalo.
El apabullante dominio del líder desde el pitido final no tuvo nunca contestación por parte de un Deportivo B que se hundió por completo nada mas empezar la segunda parte. En la primera mitad, aunque el dominio era absoluto, los irundarras apenas crearon ocasiones claras de peligro, pero el 2-0 a falta de un minuto para el descanso y el desafortunado gol de Sergio Benito en propia puerta nada más comenzar la segunda parte acabaron con la esperanza blanquiazul.
Los coruñeses decidieron ceder desde el inicio el esférico al Real Unión. Y pasó lo que tenía que pasar. Con el balón en su poder y todo el campo para jugar a sus anchas ante un rival agazapado atrás, el líder ejerció de tal y ofreció a sus seguidores un recital de fútbol. El dominio de los locales era absoluto, aunque el peligro era abortado una y otra vez en el área gallega por la zaga de un Deportivo B que, eso sí, se mostró ordenado y contundente atrás. El descenso sigue acechando.