Tras volver a ilusionar a sus seguidores, el equipo coruñés aspira a asegurar la salvación cuanto antes
22 mar 2008 . Actualizado a las 20:54 h.Tras su exitoso periplo frente al Sevilla, el Valencia y el Madrid, el partido del sábado contra el Mallorca devuelve al Deportivo a su realidad. En el mes que se avecina, sucesivos duelos contra el equipo balear, el Murcia, el Athletic, el Racing de Santander (aunque su sorprendente trayectoria lo ha llevado a la lucha por los puestos europeos) y el Osasuna demostrarán si la mejoría deportivista, rubricada frente a ilustres rivales, tiene continuidad contra otros más modestos y, al mismo tiempo, de posiciones clasificatorias más cercanas.
La sonrisa ha vuelto al deportivismo tras una segunda vuelta en la que se está esforzando por remontar posiciones en la tabla. Todo pintaba muy mal hace solo dos meses, con el equipo penúltimo, la retaguardia de plastilina y un paupérrimo balance ofensivo. Ahora las plazas de descenso siguen a la vuelta de la esquina, a dos puntos, es cierto, pero la sensación es otra.
La clasificación parece diferente. El Valladolid, el Betis y el Zaragoza alejan al Dépor de la maldita decimoctava posición, donde sigue el Recreativo, mientras el Osasuna y el propio Mallorca cuentan con los mismos puntos que los blanquiazules. Hasta la afición, recelosa antes de la calidad de su plantilla, ha encontrado nuevos ídolos. Lafita y Wilhelmsson se convierten en los rostros del éxito. Si el sueco supera las molestias que le impidieron entrenarse al mismo ritmo que sus compañeros esta semana, ambos jugarán en Mallorca, donde el cuadro coruñés aspira a inaugurar una nueva etapa.
Devuelta la ilusión, el Deportivo emprende en el estadio de Son Moix un camino que primero debe llevarle a alcanzar la ansiada permanencia matemática en la élite del fútbol español. ¿Y por qué no seguir soñando? El horizonte de los 50 puntos podría aupar al equipo entrenado por Miguel Ángel Lotina a la primera mitad de la clasificación y entonces la aspiración de jugar la próxima Copa Intertoto se vería más cercana.
No se prevén cambios en los planteamientos del técnico vasco. La única novedad prevista en la alineación deportivista, que muchos aficionados comienzan a conocer de memoria, será la del sustituto de De Guzmán. El Mallorca, que en la primera vuelta empató en Riazor pese a jugar más 50 minutos con diez, también pierde jugadores para este choque. Ibagaza, Basinas y Ballesteros son baja por sanción, mientras Güiza arrastra molestias físicas, aunque al final ha entrado en la convocatoria y nadie duda de que jugará. Hasta su tropiezo del pasado domingo en Barcelona frente al Espanyol el conjunto preparado por Gregorio Manzano era el único invicto durante la segunda vuelta, aunque, eso sí, acumulaba siete empates y una única victoria.
En juego están mucho más que tres puntos. El vencedor se alejará del descenso y, de paso, empujará a su rival al centro de la pelea por la permanencia.