Seis meses después de que se colocase la primera piedra, la obra de ampliación del puerto de Brens empieza a ser una realidad tangible, aunque pasarán unos meses para que se pueda ver como el dique empieza a ganar metros.
Después de largos preparativo, la UTE que se hace cargo de la obra, formada por Dragados, Flota Proyectos y Francisco Rodríguez, empezó ya a trabajar en la superficie de los actuales muelles de Brens. A lo largo de esta semana varias embarcaciones empezaron a desplegar una larga barrera flotante. Se trata de un elemento antiturbidez, instalada por motivos de seguridad. Servirá para evitar que los lodos que se remuevan durante las obras no se esparzan más allá de la zona de actuación. Servirá también para prevenir que cualquier posible fuga de gasóleo u otras substancias se esparza por el mar en caso de producirse.
Dragado
Además, la empresa comenzó ya a realizar labores de dragado y está lista la zanja, en el fondo, en la que se dispondrán los grandes bloques que formarán la base del nuevo puerto.
Durante los próximos meses la plataforma cajonera procedente de Canarias -que llegó a Cee a finales del pasado mes de frebrero- producirá los cubos de hormigón de 12 metros de lado que configurarán la superficie portuaria. La creación de esos bloques puede llevar entre tres y cuatro meses. La máquina trabajará de modo ininterrumpido hasta completar esos elementos, que después se hundirán en los lugares precisos. Así, todo a punta a que la UTE cumplirá con los plazos previstos y el nuevo puerto de Brens estará listo en el año 2011 y en funcionamiento como uno de los puertos más importantes de la red autonómica.
La inversión total realizada por la Xunta asciende a 14,5 millones de euros, cantidad a la que hay que sumar otros 2 millones de euros que se comprometió a pagar Ferroatlántica.
La complejidad de la obra y la necesidad de determinados materiales fueron los responsables de que hasta esta semana en el muelle de Brens apenas se percibiera actividad. Desde ahora -es lo que está previsto- ya no pararán hasta acabar la obra.
Mayores dimensiones
Cuando el puerto de Brens esté listo su superficie se habrá multiplicado con respecto al actual. El dique existente tiene una longitud de unos 300 metros y pasará a medir 710.
Ahora la superficie de trabajo es de 13.000 metros cuadrados. El área resultante tras la inversión de la Xunta ascenderá a 47.000 metros cuadrados. Pero no solo se ampliará la parte visible. El calado crecerá sensiblemente. Actualmente solo pueden atracar en Brens barcos que no sobrepasen los siete metros de calado. Tras el dragado de la zona podrán hacerlo los que lleguen a los 11 metros. Así, si ahora solo pueden acceder a Brens buques de entre 5.000 y 6.000 toneladas, cuando el proyecto esté finalizado podrán trabajar allí mercantes que alcancen las 25.000 toneladas, haciendo que las instalaciones de Cee sean mucho más operativas, ya que el transporte por barco en embarcaciones de escaso tonelaje resulta menos rentable. Para ampliar el calado está previsto que se extraigan de los fondos mediante dragado 110.000 metros cúbicos de áridos.