De cumplirse las previsiones dadas por Begasa ayer a los alcaldes mariñanos, ningún domicilio mariñano debería amanecer hoy sin suministro eléctrico. Sin embargo, a las 19.00 horas de ayer 1.500 hogares de la provincia, en su inmensa mayoría de Ourol, Xove, O Vicedo, Cervo y Viveiro, seguían sin suministro. Durante los últimos días varios tráileres cruzaron A Gañidoira para desplazar hasta Viveiro lotes de grupos electrógenos que la compañía ha repartido en las parroquias de más difícil acceso. A última hora de ayer había 55 en funcionamiento.
Desde Barras Eléctricas recordaron que los operarios que trabajan para levantar las líneas eléctricas se encuentran con serias dificultades en municipios como Ourol. Pidieron comprensión y confirmaron que los trabajos avanzan lentamente «porque las mencionadas zonas tienen una menor concentración de población». La media es que un retén integrado por 40 operarios consigan restablecer el servicio a una media de 100 hogares después de trabajar día y medio.
El alcalde de O Vicedo, Jesús Novo, confiaba ayer a mediodía que se cumplieran las previsiones avanzadas por la compañía. A excepción de Riobarba y parte de Cabanas, aseguró que el resto del municipio disponía de suministro gracias a los grupos electrógenos distribuidos. También confirmaba que las carreteras y los accesos están prácticamente limpios en su totalidad y que el pasado lunes desde Begasa se pusieron en contacto con el Concello para saber cuántas personas enfermas requerían cuidados especiales como oxígeno, casos que atendieron.
Falta de explicaciones
El regidor de Barreiros, Alfonso Fuente, criticó la falta de información por parte de las suministradoras: «En ningún momento ninguén se dirixiu a nós para dicirnos cando iamos ter luz». Agradeció el trabajo de la brigada de obras y Protección Civil y confirmó que Vilar ya tiene luz. Además, el PP de Viveiro criticó la falta de previsión y respuesta del Gobierno local ante los efectos del temporal. Lamentan que todavía no hayan sido retiradas las piedras que cayeron en la carretera de Viveiro a Celeiro y que el alcalde «a pesar de alardear de que iban a mejorar los servicios con el exageradísimo incremento de plantilla, lo cierto es que una vez más mintió a los ciudadanos».