Su decisión de retirar un depósito de zahorra fue exagerada e injusta
01 oct 2011 . Actualizado a las 06:00 h.El Juzgado de lo Penal número 6 de A Coruña ha condenado al alcalde de Val do Dubra, Juan Manuel Baleato Iglesias, a una pena de siete años de inhabilitación especial para empleo o cargo público, como autor de un delito de prevaricación con la atenuante de reparación del daño. El regidor dubrés anunció la presentación de un recurso ante la Audiencia Provincial.
Los hechos se remontan a abril del 2007, cuando la empresa Hijos de Buján, de la que es propietario José Rodríguez Bardanca, depositó de forma provisional en una finca sita en Xeisal-Niveiro, en el municipio de Val do Dubra, y propiedad de José Miguel Parcero Parcero, con la autorización de este, unos cien camiones de material rocoso conocido como zahorra, con el objetivo de venderlo. «Dicho material, aunque fue depositado a unos veinte metros de un regato, al no ser contaminante, no suponía ningún riesgo para el medio ambiente ni para dicho cauce fluvial», según declara probado el magistrado Francisco José Ruano Hernández.
Tras haber recibido alguna llamada de vecinos informándole del almacenamiento de este material y ante lo que consideraban un peligro de arrastres por lluvias, «y en todo caso siendo competente para la defensa del dominio público hidráulico otro organismo, en este caso Augas de Galicia, sin perjuicio de las facultades que legalmente pudiera tener y que le asistían como alcalde, sin contar con ningún informe técnico ni jurídico, ni realizar ningún apercibimiento ni notificación a los interesados», el 22 de junio del 2007 Juan Manuel Baleato llamó por teléfono a un primo suyo que es gerente de una empresa de excavaciones y le ordenó verbalmente que retirara la zahorra depositada por Hijos de Buján, «a sabiendas de que era propiedad privada».
Así fueron retirados 26 camiones de zahorra valorada en 3.870 euros, que se utilizó para pavimentar un camino de concentración parcelaria indicado por el alcalde. El resto del material depositado no fue retirado porque José Rodríguez Bardanca descubrió el 27 de junio estos hechos y los denunció ante la Guardia Civil.
La sentencia añade que cuando el alcalde de Val do Dubra tuvo conocimiento del procedimiento judicial abierto tras la denuncia, el 10 de octubre del 2007 resolvió incoar expediente sancionador por un presunto vertido de escombros en camino público a Hijos de Buján.
El juez afirma que lo relevante de este caso es que «la decisión verbal de retirar los materiales acumulados lo fue sin base alguna, carente de causa, exagerada, desproporcionada, precipitada y con absoluto olvido de fundamentación normativa». La sentencia indica que pese a la supuesta urgencia de la retirada del material, aunque el alcalde tomó la decisión el 22 de junio, no se ejecutó hasta el 25. El magistrado también se remite a los informes para afirmar que no había riesgo alguno para el regato ni para el medio ambiente y reitera que dicha zahorra no era contaminante. Sobre la posible obstaculización de camino público a causa del depósito, indica que no quedó acreditado.
Difícil sin dolo
«En definitiva, no consta por tanto ni necesidad ni urgencia para tan importante y grave medida», sentencia el juez, que la considera «injusta y arbitraria». Más aún, añade que «es difícil justificar que se hiciera por mera impericia, negligencia o sin dolo directo», y cita la experiencia y conocimiento del procedimiento administrativo que debe tener Baleato, que lleva desde 1991 en la alcaldía.
La sentencia estima la atenuante de reparación de daño causado porque el regidor, antes del juicio oral, consignó el importe de la cuantía reclamada a favor del denunciante.