Aprovechando la visita de Simone Klinge, integrante del secretariado del Consejo de Europa para la Carta Europea de las lenguas regionales o minoritarias, una delegación de la plataforma ciudadana Queremos Galego le trasladó su preocupación por las últimas acciones del Gobierno autonómico en política lingüística.
Además del «desmantelamento» de las galescolas y las bases para el decreto del plurilingüismo, la plataforma también hace referencia en un documento entregado a Klinge a la justicia, los medios de comunicación, las autoridades administrativas, los servicios públicos o la vida económica y social, así como la reforma de la Lei de Función Pública sobre la obligatoriedad de examinarse en gallego en las oposiciones. Todo, en el mismo día en el que los expertos participantes en las jornadas de análisis sobre la carta europea de las lenguas coincidieron en que España debe corregir sus carencias en este sentido.