El alcalde dice que irá a los tribunales si FCC no paga el 51 % del déficit
23 mar 2013 . Actualizado a las 07:05 h.El culebrón de Augarsa seguirá dando que hablar en los próximos meses porque no parece que las acusaciones vertidas por ambas partes -el gobierno local y el socio privado de la empresa mixta, Aqualia- lleguen a su fin. Bien porque Aqualia responsabiliza al alcalde, Carlos Calvelo, de la disolución de la empresa al considerar que «debe responder del daño que ha causado con sus actos, omisiones y reiterados incumplimientos de su cargo, actitud que ha llevado a la sociedad, y al servicio que gestionaba, a la inviabilidad económica indicada». O bien porque el alcalde de Arteixo basándose en informes técnicos acusa al socio privado de Augarsa de incumplir el contrato al «tan solo haber invertido en la red de saneamiento dos millones de los 19 que aparecen en el contrato». También responsabiliza a Aqualia de la gestión llevada a cabo durante los últimos años y cuya deuda asciende a cerca de 2,5 millones de euros.
El primer paso que preocupa al gobierno local es que Aqualia, o en su defecto FCC, asuma la parte correspondiente de la deuda de Augarsa.
De no ser así, Carlos Calvelo tiene claro que acudirá a los tribunales: «Por supuesto que tendrán que asumir su parte. Les corresponde como mínimo el 51 %. Y parece que FCC quisiera obviar que tiene una deuda y que sea el Concello quien la asuma. No lo vamos a permitir porque Aqualia es responsable de esa deuda, no los vecinos de Arteixo. Tienen que ser conscientes de que no pueden generar una deuda y mirar para otro lado», explicó.
Situación real de la red
Además de incumplimiento del contrato, el primer edil de Arteixo explica que se exigirán responsabilidades a Aqualia, ya que era la encargada de la gestión de la empresa mixta. Además, indica que se estudiará «la situación real» en la que se encuentra la red de saneamiento y «se verificará si Aqualia es responsable de su deterioro».
En cuanto a la petición de Aqualia de que se desestimase la demanda interpuesta por ellos mismos contra el Concello al negarse a subir la tarifa del agua y acusar al gobierno de no restablecer el equilibrio económico de Augarsa, Calvelo calificó la situación de «esperpéntica» y de que la parte privada actúa «según sus intereses»: «No se puede jugar con la Justicia. Antes decían que no queríamos restablecer el equilibrio económico de Augarsa y ahora parece que ya no les interesa», concluyó Calvelo.