Levantar el veto al urbanismo de Barreiros, un rompecabezas

GALICIA

Un promotor manifiesta que pedirá compensaciones y pone de relieve las grandes dificultades para superar el conflicto

04 nov 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

El plan anunciado por la Xunta para desbloquear el urbanismo en Barreiros, en la costa de Lugo, presenta incógnitas que permiten augurar un largo y complejo camino por delante. La voluntad política para tratar de solucionar el conflicto es evidente, pero no está claro que con eso baste. La maquinaria judicial se ha puesto en marcha, la situación de los promotores ha cambiado y cerrar las heridas llevará mucho tiempo. Eso, si se logra, porque ni en el mejor de los escenarios el plan solucionará la situación de todas las promociones de Barreiros. Es evidente que la Xunta ha dado un giro en su política, pero la duda es, ¿llega a tiempo?

«Nós non imos renunciar ao que temos alí e que nos costou tanto». Así se pronuncia José Quintas, administrador de Proquintas, cuya urbanización de chalés de lujo fue paralizada en el verano del 2007 por un juzgado de lo contencioso a raíz de la denuncia de la Xunta. El pasado día 30 se celebró el juicio en el que reclama seguir edificando. Curiosamente, el plan presentado ahora por la Xunta deja fuera esta promoción porque está en la franja de 500 metros de costa, en San Bartolo.

José Quintas estima que la inversión prevista en su urbanización era de 30 millones de euros. Era una parte de un proyecto más ambicioso para el que dispone de unos 170.000 metros cuadrados. Todo está parado desde hace más de dos años. Por eso ahora, aunque le permitan seguir adelante, Proquintas reclamará al Ayuntamiento, y por extensión a la Xunta, lo que considera su derecho: una compensación.

Exigir responsabilidades

«No noso caso, con semellante inversión, hai un quebranto económico do que dalgunha maneira, non sei como, terannos que resarcir. Eu entendo que a actual Xunta non ten que ver con iso, que agora está actuando para resolver o conflito, pero haberá que pedir responsabilidades a aqueles políticos que antes, con esa soberbia e prepotencia, obraron desa forma irresponsable sen medir as consecuencias», manifestó José Quintas.

La batalla política también está abierta. El PSOE y el Bloque de Barreiros apuntan que cuando la Xunta decide intervenir con un plan de obras para consolidar cuatro núcleos urbanos está reconociendo que carecían de los servicios precisos -luz, agua, alcantarillado, calles, etcétera- para justificar las licencias de edificios que otorgó el Ayuntamiento.

Otra duda surge con los juicios que ya están en marcha, algunos de ellos vistos para sentencia. Urbanismo de la Xunta está dispuesto a paralizar los contenciosos, pero obviamente solo en los casos que legalmente sea posible.