El filial celtiña consiguió un pobre empate ante el colista de la categoría, el Sanse. El equipo de Alejandro Menéndez no estuvo fino durante los 90 minutos y tuvo que remontar el gol del Local Sestelo. Y Pudo ser peor, ya que las mejores ocasiones fueron locales, con algún remate al larguero. Sólo la habitual falta de acierto local propició la reacción gallega y, gracias al oportunismo de Joselu al rematar una falta, lograron salvar un punto que no les permite despegarse definitivamente de la zona de descenso.
El Celta B visitaba el campo del colista, el Sanse, equipo que todavía no ha inaugurado su casillero de victorias y que parecía el equipo propicio para que el filial celtiña ganase y también lograse conseguir la primera victoria fuera de Vigo. Para ello, Alejandro Menéndez dispuso un equipo muy atacante, en donde el serbio Goran Maric, pichichi gallego con 8 goles, estaba acompañado por Ábalo o Ferrán, mientras que también contaba con la aportación ofensiva del asturiano Michu y de José Manuel.
El filial explotó inicialmente las bandas, sobre todo con las internadas de Dani Abalo, aunque los centros, excesivamente forzados, no encontraban el remate de ningún compañero.
El Sanse se quitaba la presión viguesa con jugadas aisladas pero no exentas de peligro, como lo demostró un centro de Aristizábal al área y en donde Alex hizo lo más difícil y remató espantosamente cuando se encontraba sólo ante Yoel.
El partido cogió un ritmo vertiginoso en la segunda parte y cualquiera podía marcar, como lo demostró la falta que el sansero Álvaro estrelló en el palo derecho. El Sanse continuó apretando hasta que en el minuto 69, Alex corrió la banda derecha y le dio el pase de la muerte a Sestelo que batió a Yoel poniendo el 1-0 en el marcador.
Un cabizbajo Menéndez veía como el Sanse apretaba y su equipo no reaccionaba. Los locales se dedicaban además a perder el mayor tiempo posible. Una lesión de Bailén con los cambios agotados dejó al Sanse con diez en los minutos finales y el Celta B consiguió aprovecharlo al rematar Joselu una falta botada por Richi.
El empate parecía justo y mas que por la temperatura gélida de la tarde, sería el gol de Joselu el que heló a la afición local. Durante los últimos minutos, ninguno de los dos equipos pudieron concretar sus escasas ocasiones. El filial mantiene tres puntos de margen sobre la zona de descenso.