Si no se aceptase su propuesta se pone a disposición de los consejeros a nivel individual
21 nov 2009 . Actualizado a las 02:00 h.El ex gerente de Incolsa, Inaki Gaztelumendi, responsable de la gestión de la empresa municipal de Turismo en el período en que se remitieron las polémicas facturas a la dirección xeral de la Xunta con competencias también en esa materia, ha decidido romper su silencio sobre ese proceso y ayer mismo se ofrecía al consejo de administración de Incolsa para aportar su versión.
Gaztelumendi ha decidido declarar ante dicho órgano, si este así lo estima oportuno, una vez conocidas las explicaciones públicas ofrecidas por el concejal del área turística, el nacionalista Xosé Manuel Iglesias, después de que el PP pidiese su comparecencia en el pleno de la corporación ante sus sospechas de que el edil hubiese entregado personalmente en la Xunta, cuando el bipartito ya estaba en funciones, facturas por trabajos no realizados con el objetivo de cubrir parte del déficit que arrastra la empresa municipal precisamente por la inconcreción de varios convenios que la Xunta había comprometido con ella.
En un escrito remitido a la gerencia de la empresa municipal y a sus consejeros -en el BNG sostienen que no a los suyos-, el ex gerente de Incolsa le comunica su disponibilidad para ser convocado por el consejo de administración «y explicar los detalles de este asunto» en su calidad de director-gerente de la entidad en el momento en que se produjeron los hechos y toda vez que Iglesias «señala a los servicios administrativos de la sociedad» en las explicaciones que ha ofrecido hasta el momento. Frente a las acusaciones de irregularidades del PP, el edil de Turismo sostiene que la remisión de esas facturas a la dirección xeral siguió los cauces habituales y achacó a un error que fueran conformadas como facturas y no como un presupuesto, que es lo que se les había pedido a las empresas, asegura.