La Xunta prepara aún ahora la obra para el apagón analógico en la zona

M. Cheda

SANTIAGO

El Gobierno actual culpa al anterior de que la TDT no arrancase el 30 de junio y dice que lo hará antes de finalizar el año

21 ago 2009 . Actualizado a las 10:31 h.

La Xunta inició aún ayer los trámites de contratación de entre una y tres empresas privadas que supervisen el despliegue de los aparatos necesarios para poder implantar definitivamente en Santiago y 43 concellos bajo su órbita la televisión digital terrestre (TDT) y, en consecuencia, proceder al cese de las emisiones en analógico, las de toda la vida. Estas últimas deberían haber concluido, como muy tarde, el pasado 30 de junio, si bien no lo harán hasta finales de año, según estimaciones del actual Gobierno gallego (PP), que culpa del retraso al anterior (PSOE más BNG).

La Administración autonómica adjudicará hacia mediados de septiembre las tareas de control del suministro, instalación y puesta en servicio de equipos de difusión que extiendan la cobertura de TDT a lo largo y ancho de una zona donde residen 383.314 personas. Por un máximo de 174.000 euros, los expertos que resulten elegidos deberán multiplicarse para auditar «antes do 31 de decembro» 60 puntos de emisión y reemisión ubicados tanto en la propia Compostela como en los ayuntamientos vecinos de esta que se detallan arriba en una tabla.

Las obras cuya inspección la Xunta está empezando a preparar tendrían que llevar meses acabadas, pues para hace dos estaba previsto que la TDT se convirtiese en la única forma de ver tele gratis en la capital y su hinterland. En mayo, no obstante, el Ministerio de Industria pospuso sine díe ese apagón analógico, tras adquirir la consciencia de que en la fecha fijada no se darían las condiciones mínimas exigibles para ejecutarlo: reducción de los lugares de sombra a la mínima expresión y acceso masivo desde los hogares a la programación digital.

El Ejecutivo de Núñez Feijoo, en colaboración con el español, acaba de activar la maquinaria burocrática para solucionarlo. Pero, ¿por qué ahora y no cuando realmente procedía? «La causa de la demora, fundamentalmente, radica en que al llegar [al poder en abril] nos encontramos con que no había nada hecho. Tuvimos que partir de cero porque [los miembros del bipartito] no habían dejado fondos disponibles ni planificación ni consignación presupuestaria», sostiene el secretario xeral de Medios. «Se han perdido ocho meses -admite Alfonso Cabaleiro-, eso es así. Pero ya hemos forjado una absoluta colaboración con Madrid y puesto los medios para remediar el problema y garantizar una cobertura universal a todos los ciudadanos, incluidos los del rural. Además, hemos enviado cartas a los alcaldes de Galicia para ponerlos al tanto de la situación».