La Diputación galardonó también a la asociación Arela, de Cans, a Wenceslao Cabezas y al Concello de Cangas
17 nov 2011 . Actualizado a las 18:12 h.El genial artista Leopoldo Nóvoa (Salcedo, 1919) ha sido galardonado por la Diputación de Pontevedra con el Premio Provincial de Cultura 2011 a toda una trayectoria. El presidente Rafael Louzán anunció ayer el fallo de estas distinciones, que recayeron también en la Asociación Cultural Arela de Cans, de O Porriño, Wenceslao Cabezas del Toro Polo y el Concello de Cangas.
Nóvoa comenzó su carrera artística en 1926, dibujando, pintando y haciendo modelaje. Y a partir de 1953 su obra fue expuesta en los principales museos del arte contemporáneo del mundo, Nueva York, Milán, Bruselas, París, Madrid...
«A súa obra proxecta en todo o mundo a provincia de Pontevedra. É un artista que se inspira no seu mundo de Armenteira y o conxuga cun sentido aberto e universal», subrayó Louzán sobre el premiado.
En el apartado de innovación, la Asociación Arela fue distinguida por la puesta en marcha del Festival de Cans, un certamen audiovisual que nació en el 2003 y acercó los cortometajes al rural, además de otras manifestaciones culturales. El jurado valoró especialmente la participación activa de todos los vecinos de la parroquia porriñesa en dicho festival y también que se trata de una plataforma de lanzamiento de nuevos creadores gallegos.
Este premio se concedió en ediciones anteriores al Museo Etnográfico Casa do Patrón,, a la Fundación Casa Museo Piloño y a la Fundación Igual Arte, de Vigo.
El premio César Dios Diosiño a la música popular fue para Wenceslao Cabezas del Toro Polo, por su contribución a la música gallega desde los 14 años, cuando comenzó a tocar los instrumentos tradicionales y a bailar las danzas de esta tierra. Desde 1960 dirige la Escuela Municipal de Danza de Vigo, por la que han pasado más de 30.000 alumnos.
Por último, el premio a la Protección del Patrimonio Público fue para el Concello de Cangas, por su apuesta por la recuperación y puesta en valor del Monte Facho, en la parroquia de Donón, donde perviven restos de un poblado castreño, una garita de vigilancia prerromana y un antiguo faro romano. La Mancomunidade do Salnés y los Concellos de Campo Lameiro también están en posesión de este galardón.