La Policía Nacional recuerda en Vigo en su día de fiesta el perfil más humano de la institución

Más allá de la institucionalidad de un acto solemne, de los protocolos, de los uniformes, de los abrazos sentidos y los saludos de cortesía, cada celebración del patrono de la Policía Nacional evidencia y recuerda siempre el valor humano de estos funcionarios. Ayer no fue una excepción, lo verbalizó el comisario provincial, Juan José Díaz Jiménez, en su discurso ante un auditorio repleto de compañeros y familiares. Díaz habló por la imposibilidad de asistir al acto el máximo responsable de la Comisaría de Vigo-Redondela, Ramiro José Gómez, convaleciente de covid, pero que dejó escrito un texto que Díaz leyó.

Habló de «máxima exigencia» para el cumplimiento de las obligaciones, de «eficacia», de la necesidad de «mantenerse a la vanguardia», de hacer gala de un perfil «urbano, moderno e igualitario». También se invocó la necesidad de «liderazgo en la seguridad pública», de proteger y amparar» a la ciudadanía, pero sobre todo de ser «imparcial» en la práctica de las obligaciones, de ostentar una vocación humana, de no incurrir en actitudes arbitrarias, de no bajar la guardia en cada día del año, de mantener una coordinación perfectamente engrasada con el aparato judicial y con el resto de cuerpos de seguridad.

Por eso, Díaz, jefe provincial, le dio las gracias a cada uno de los funcionarios que integran la Comisaría de Vigo-Redondela por su trabajo durante el año transcurrido, desde la última celebración de los Ángeles Custodios, patrón del Cuerpo Nacional de Policía: «Sois los mejores, estar alerta: Vigo, Redondela y España os necesita». La segunda parte del acto sirvió para entregar la orden del mérito policial por su actuación singular a los funcionarios que el Ministerio del Interior reconoce esa labor especial: José Antonio Fuentes, Antonio José Torres, Ruth Isabel, José Antonio Cano, David Roca, Antonio Cordero, Manuel Javier Míguez, Manuel Piñeiro, Olaya Viñas, Diego Estévez, Manuel Vázquez, Óscar Rivas y María Dolores Fernández recibieron sus medallas.

El Cuerpo Nacional de Policía reconoció igualmente a instituciones públicas y privadas su colaboración para el avance de la institución con placas conmemorativas de regalo. A la Universidad de Vigo, a la plantilla de agentes portuarios de la ciudad, al departamento de medicina preventiva del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo y a la empresa Alcampo, por sus donaciones de material infantil para todos los niños que, llegados de Ucrania, encontraron refugio en Vigo a través de la brigada de extranjería de la comisaría.

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