La Asobal se jugará todos contra todos

efe MADRID

VIGO

Xoán Carlos Gil

El Cangas apostaba por una liga pura y no divididas en grupos

13 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La Liga Asobal de la temporada 2020/2021, en la que volverá a militar el Cangas, se disputará finalmente en el formato de todos contra todos tras el acuerdo alcanzado ayer entre la Federación Española de Balonmano y la Asobal en una reunión en la que, además de los presidentes de ambos organismos, participaron los 18 equipos que competirán la próxima campaña en la máxima categoría del balonmano español.

«Ante la solicitud formulada por los clubes participantes, la RFEBM ha mostrado su comprensión y ha aceptado asumir ante la Asamblea General algunas modificaciones en los planteamientos de cara a la próxima temporada de forma que se propondrá que la Liga Asobal se pueda disputar en formato de Liga Regular con 34 jornadas», señalaron la Federación y Asobal en un comunicado conjunto ayer.

Esta propuesta, que deberá corroborarse en la Asamblea General de la RFEBM que se celebrará hoy, pone fin a la disputa entre ambos organismos por el formato de la competición, ya que mientras que la mayoría de los clubes de Asobal se inclinaban por una Liga de todos contra todos, la Federación propugnaba un Liga de dos grupos para reducir el número de jornadas.

Asimismo, durante la reunión que «se prolongó durante más de dos horas en términos de cordialidad y consenso», se acordó que la Copa del Rey se dispute en «un formato único de fase final».

La Federación y la Asociación de Clubes acordaron igualmente que se «aplace la aplicación del play-off de descenso a la temporada 2021/2022». Por otra parte, se acordó que la comisión RFEBM-Asobal mantenga en el futuro reuniones periódicas «a fin de ir preparando y negociando las cuestiones relativas tanto a próximas temporadas como a situaciones puntuales, entre ellas la recuperación por parte de la RFEBM de los derechos de retransmisión televisiva de la fase final de la Copa del Rey».

La Federación y Asobal «confían» en que los acuerdos alcanzados constituyan un «punto de inflexión» en su relación.