¡Por fin hay calabozos en el juzgado de Tui!

Monica Torres
mónica torres TUI / LA VOZ

VIGO

Mónica

Las nuevas intalaciones dan servicio a un partido judicial de 50.000 personas

28 nov 2019 . Actualizado a las 13:42 h.

Tui ha pasado de tener unas instalaciones judiciales tercermundistas a un centro vanguardista en año y medio. Tres millones de euros de inversión sirvieron para poner fin a diez años de espera en los que jueces, procuradores, abogados y demás empleados públicos han tenido que multiplicar esfuerzos para mantener la actividad en condiciones extremas. La propia jueza decana, Lidia Grandal Quintana, que ayer descubrió la placa del nuevo juzgado, sorprendió al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, explicándoles durante la visita la situación vivida. «Esta sala de vistas es más grande que todo mi juzgado», dijo en presencia de un centenar de personas.

Más allá del acto institucional, en el que se dieron cita altos cargos de la Policía Nacional, la Guardia Civil y el presidente de Tribunal Superior de Xustiza, José María Gómez y Díaz, la sección más fotografiada fue a la que no acudió ninguno de ellos. Decenas de personas se sacaron selfis o se dejaron fotografiar en los dos calabozos con los que cuentan las instalaciones y que suponen toda una novedad. Había en la sede de a Policía Local, pero no estaban reformados. Según el público que ayer estrenó los nuevos para las fotos, «son estancias hasta acogedoras». Fue la nota simpática de un acto muy institucional pero también distendido, ya que acudió un nutrido grupo de letrados y representantes de los funcionarios públicos.

No ha lugar a comparaciones. «Yo no tenía ventanas ni puertas en mi despacho, que además daba a una acera con muchísimo ruido. Ha sido muy difícil mantener la actividad y en estos dos últimos años ya nos afectaba a la salud oirque no había calefacción ni ventilación, ni sala de vistas así que cada cosa era un problema», recordó la jueza decana, titular precisamente de la sala que se habilitó «de forma provisional» en un bajo comercial pero en el que han tenido que trabajar diez años. «Era una situación de lo más indigna para toda la función judicial. Podríamos decir que se ha hecho justicia porque este es un edificio muy moderno, con espacio suficiente, organizado y además bonito», indicó Lidia Grandal.

Los letrados presentes valoraron en la misma línea el salto que supone el edificio, que además permite unificar los tres juzgados del municipio, era una histórica demanda. El alcalde, Enrique Cabaleiro, también destacó su importancia «para mellorar a dignidade desta institución». Su puesta en funcionamiento ya solo depende de la licencia de actividad. Serán una treintena de empleados públicos los que trabajen en las instalaciones de un partido judicial de 50.000 personas.