Caballero añora el antiguo Bloque: «Santiago Domínguez cooperaba»

Juan Manuel Fuentes Galán
Juanma Fuentes VIGO / LA VOZ

VIGO

El alcalde se revuelve contra Veloso por tildarlo de «despótico e autoritario»

22 may 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El alcalde de Vigo añora la etapa en la que el grupo municipal del BNG estaba dirigido por Santiago Domínguez, quien dejó la portavocía hace año y medio. En esos años el BNG formó parte de un gobierno municipal de coalición con el PSOE o al menos le votó los presupuestos a Caballero. Con la llegada de Iolanda Veloso las relaciones se han tensado, hasta el punto de que por primera vez, este año no ha habido acuerdo presupuestario.

Lo que era un alejamiento evidente entre Caballero y Veloso se verbalizó ayer tras una comparecencia televisiva la noche anterior, en la que Veloso definió al alcalde vigués como «autoritario e despótico», negando además que estuviera haciendo políticas de izquierda. Ocurría en la noche del martes en el programa Vía V, de V Televisión, en el que Veloso fue entrevistada por su directora, Fernanda Tabarés, principalmente sobre la situación generada en el Concello vigués tras el pacto presupuestario de PSOE y PP.

Preguntado por estas declaraciones, Caballero evitó ayer una respuesta directa. Por el contrario, eligió descalificar a la nueva portavoz nacionalista a la vez que elogiaba a su antecesor. «En el BNG tienen que competir con Beiras, y desde que se dedican a eso caen en la excentricidad y en el ataque a Vigo», afirmó.

Según el regidor, «los nacionalistas tenían un compromiso con los electores: si no se producía una mayoría absoluta reeditarían un gobierno con el PSOE. No cumplieron eso y ahora tampoco van a votar los presupuestos. Se siguen equivocando porque se ven barridos del escenario político en Vigo, donde literalmente el BNG no existe» (sic).

Tras este análisis, expresó su opinión sobre el cambio en la dirección del grupo municipal. «Este Bloque no es el de hace dos o cuatro años. Hay un cambio de posición política: con Santiago Domínguez al frente, el BNG cooperaba, y con las actuales posiciones va absolutamente a la deriva».

Reacción inmediata

Minutos después de esta palabras, Iolanda Veloso le replicaba haciéndose una pregunta que podría tener una doble lectura. «Ao mellor é que ten máis doado relacionarse cos homes que coas mulleres», espetó Veloso. En la misma línea, sugirió que posiblemente el alcalde prefiera «o debate político cos homes, que non con mulleres que lle din as cousas con claridade».

En cualquier caso, la dirigente nacionalista negó la mayor, asegurando que la posición del grupo municipal la decide el BNG y no sus portavoces. «Nós mantemos a mesma postura desde o principio: Santiago Domínguez dixo na constitución da actual corporación que o voto nacionalista a Caballero para a alcaldía non era un cheque en branco», reiterando que el presupuesto que han votado PP y PSOE es inaceptable para los nacionalistas.

En otras palabras, no existe incompatibilidad personal con el alcalde y sí desacuerdos políticos, aunque también Veloso reconoció dificultades para relacionarse con Caballero en el plano personal.

Nuevo escenario

La crispación que rodea las relaciones entre los antiguos socios no ha parado de crecer en los últimos meses, acentuada tras los acuerdos entre socialistas y populares que han dejado al BNG en una posición marginal. Paralelamente, los habituales enfrentamientos entre el alcalde y los dirigentes populares, tantos locales como con el presidente de la Diputación y el de la Xunta, se han convertido en residuales desde hace algunas semanas.

A la espera del pleno de aprobación del presupuesto está garantizado que se mantendrá la luna de miel entre los hasta ahora fieros enemigos políticos. Lo que ocurra después es una incógnita. Entonces ya se conocerá el resultado de las elecciones europeas, las últimas antes de las municipales de mayo del 2015.

Antes, el PP deberá tomar una decisión clave: ratificar a José Manuel Figueroa como candidato a la alcaldía tras su apoyo a Caballero, posiblemente su objetivo con el polémico pacto, o bien decidir su relevo.