Padres del colegio Carmelitas se sienten acosados por las multas

alejandro martínez VIGO/ LA VOZ

VIGO

La falta de espacio para estacionar fuerza la ocupación de las aceras. FOTOS:
La falta de espacio para estacionar fuerza la ocupación de las aceras. FOTOS: cristian álvarez< / span>

La Policía Local les sanciona cuando van a llevar o a recojer a sus hijos

02 jun 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Padres de alumnos del colegio de Carmelitas de Vigo denuncian el exceso de celo sancionador de la Policía Local cuando dejan sus vehículos en la acera para dejar o recoger a sus hijos.

El centro escolar se encuentra en la calle Pi y Margall, que posee solamente una dirección para los turismos y un carril bus en sentido contrario.

El tráfico se vuelve caótico a las horas de entrada y salidas de clase porque los padres que llevan a sus hijos en coche no tienen un sitio adecuado para estacionar durante unos minutos. Los conductores no tienen más remedio que subirse sobre la acera o bien interrumpir el tráfico.

La Policía Local pasa regularmente por esta avenida y suele multar a vehículos que se encuentran mal aparcados.

Esta situación ha generado malestar dentro de la comunidad escolar porque no les queda otra alternativa que incumplir la normativa de tráfico debido al diseño actual de la calle.

Los padres van a reunir todas las multas que les han impuesto a lo largo de este curso escolar para presentárselas al concejal de Seguridad Ciudadana para que se haga consciente del sacrificio económico que está suponiendo este exceso de celo entre muchas familias. Le solicitarán que ordene a los agentes que sea más flexible y que afloje la presión sobre ellos.

La dirección del centro también ha tomado cartas en el asunto y se ha dirigido al ayuntamiento para solicitar un vado a lo largo de toda la fachada del edificio sin que haya sido admitido.

Sin alternativa

A muchos padres no les queda más remedio que llevar a sus hijos en coche al colegio, especialmente durante el invierno debido al mal tiempo y sobre todo cuando los alumnos son de corta edad. Lamentan que no haya aparcamientos cercanos donde poder dejar el coche para continuar andando hasta el colegio.

Los padres afirman que este problema se ha agravado con lasa obras de humanización de la calle que se llevaron a cabo hace unos años, puesto se anchearon las aceras.