El Deportivo traspasa fronteras

TORRE DE MARATHÓN

Pablo Vázquez, Balenziaga y Barcia
Pablo Vázquez, Balenziaga y Barcia César Quian

12 dic 2023 . Actualizado a las 09:56 h.

No hubo jornada en la quinta división del fútbol nacional, sí hubo fútbol en el resto de las competiciones. Apasionante triunfo del Girona en Montjuich, golazo en Madrid de Sergio Ortuño, exfabrilista, del mismo calibre el de Antón de Vicente en el Vero Boquete, y la Ponferradina y el filial del Celta lideran la categoría de bronce. Nuestro Dépor se encasquilla, no arranca, Riazor es un escenario que le está quedando grande, mucho ruido y pocas nueces. Un empate que sabe a derrota, porque los líderes ya se distancian tres semanas, nueve puntos, y, muy a nuestro pesar, no vemos capacidad de recortar esta distancia. Bendito mercado invernal, que es donde se agarra nuestra ilusión y fe.

Leí un tuit de un aficionado del Sestao donde compartía: «Balenziaga no le mete un gol a nadie y nos lo tiene que meter a nosotros», y menos mal. Tuvieron que tirar de orgullo y experiencia dos de los veteranos para igualar el partido. Pero, a raíz de esto, nada de nada: pocas ideas en ataque y mucho ímpetu, muchas pérdidas de balón y, a causa de ello, somos más vulnerables en defensa, tenemos que correr hacia atrás e incluso improvisar con conducciones de los jugadores de primera línea esperando movimientos de los de delante que no llegan y, si lo hacen, nunca en el momento y forma.

Compartí el fin de semana con un amigo de los que deja el fútbol y pasan a ser fundamentales en tu vida. Fuimos compañeros tres años, dos en el Fabril, aquel maravilloso año con la fabrilia que conectó a compañeros, parejas y afición. Hablamos poco de fútbol, pero fue inevitable hablar sobre el Dépor. Ha sido una parte importante de nuestras vidas, y las palabras que más utilizamos fueron ojalá y esperemos. Son términos que hablan de un futuro incierto, pero ilusionante, y no deja de ser otra prueba más de la capacidad que tiene de enganchar el Dépor esté donde esté y halles donde te halles.

No queda otra que pensar así, alegrarse de las cosas que nos regala el Deportivo y apoyarle en las duras y las maduras. Yo me alegro de poder seguir yendo a Riazor con amigos y familia, porque, como dice La M.O.D.A., «corazón que no se alegra nunca cría buena sangre».

Posdata: en la última aduanada, decía que la peña deportivista RCD London estaba apagada o fuera de cobertura. Pues, gracias a este espacio, se han puesto en contacto conmigo para poder vivir en abril el Dépor con ellos en su nueva sede. #planazo