El serbio no llegó al segundo de posesión en un partido en el que su estadística revela que tocó una vez la pelota
15 dic 2019 . Actualizado a las 22:46 h.Muy mal se tienen que dar las cosas para que una de las novedades elegidas para revolucionar el ataque del Deportivo en Ponferrada solo logre tocar un balón en todo el partido. Y muy mal se dieron las cosas para Sasa Jovanovic.
Era el minuto 35 de partido. Mujaid, a trompicones, había ganado línea de fondo. Pero Saúl Crespo lo tenía arrinconado contra el banderín de córner y detrás, Ríos Reina, otro compañero, estaba atento por si el canterano del Deportivo esquivaba la primera línea de presión. Ningún jugador coruñés acudió a esa esquina del Toralín a brindar una posibilidad de pase al improvisado lateral deportivista. Aún así, Mujaid se las arregló para que, con un golpeo afortunado, la pelota cogiese dirección al área. Allí estaba Jovanovic que vio cómo la pelota se dirigía hacia su posición. Cuando llegó a sus pies, intentó un control orientado, pero Pablo Trigueros impuso su físico y se llevó la pelota. Y ya. Esa fue la contribución de Jovanovic al equipo.
Parece imposible que en un partido en el que el Deportivo necesitaba de manera innegociable la victoria, uno de sus atacantes estuviese menos de un segundo en contacto con el balón, pero así fue.
Jovanovic completó su estadística para olvidar con una falta cometida y dos fueras de juego antes de ser sustituido por Luis César al descanso cuando el marcador ya indicaba el 2-0 que acabaría siendo el resultado definitivo.