Un mercado frío, una plantilla suficiente para el ascenso del Deportivo

Paulo Alonso Lois
Paulo Alonso EL TERCER TIEMPO

TORRE DE MARATHÓN

ANGEL MANSO

02 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Consumido enero, el Deportivo tiene una plantilla suficiente para ascender. Porque el mercado de invierno deja una noticia buena y una mala. No se debilita, pese a que el brillante rendimiento de sus jugadores clave podía conllevar presiones que desestabilizasen el grupo. Pero tampoco da un salto de calidad con varios jugadores incontestables que pinchen al grupo. Hubo vidilla por las mudanzas de los cedidos fuera, alguno estratégico para el futuro, pero todos descartados ahora para remar hacia Primera.

No pierde el club sin Gerard Valentín, irrelevante para los cuatro entrenadores que ha tenido en Riazor. Pero sí se debilita sin Carles Gil porque, aunque su producción de goles es anecdótica y no llegó a explotar en el Dépor, su talento debería encajar en la mediapunta de un rombo que Natxo no da por enterrado aún de forma definitiva.

El fichaje de Íñigo López, que solo jugaría si fallasen dos centrales y hasta uno de los dos laterales (Bóveda abrió la Liga como titular en el eje), aporta un parche para una eventualidad. La llegada de una baja del Extremadura y de 36 años revela una falta de confianza del club hacia el Fabril hasta para abordar esa improbable cadena de bajas.

Nahuel Leiva es la apuesta. Talento y juventud en préstamo para remover el ataque y paliar una puntual falta de gol que, después de dos partidos convincentes, parece quedar ahora en anécdota. Es la cara de un mercado en el que el club removió mucho y finalizó poco, sin concretar el plan de hacerse con un centrocampista con llegada, un perfil que habría equilibrado más un vestuario donde, pese a todo, Natxo González tiene intérpretes suficientes para devolver al equipo al lugar que nunca debió abandonar.