Tras frustrarse su fichaje por el Krasnodar ruso, el central brasileño tiene que regresar al Deportivo para reincorporarse a la dinámica de grupo con las mismas exigencias que el resto de compañeros
23 jul 2018 . Actualizado a las 15:42 h.Sidnei vuelve a ser jugador del Deportivo a todos los efectos. Es más, nunca dejó de serlo, puesto que su salida estaba condicionada a cerrar el acuerdo con el Krasnodar. Sin embargo, la ruptura de negociaciones entre sus agentes y el club ruso -así lo expresó el Deportivo en su comunicado-, después de que ambas entidades hubieran alcanzado un acuerdo, ha hecho replantearse al club coruñés la situación del brasileño.
El central tiene orden de reincorporarse a la dinámica de grupo como uno más. A partir de esta semana (se espera que pueda regresar hoy, pero no es seguro por los enlaces aéreos) participará en el trabajo diario e incluso empezará a jugar amistosos como un integrante más del plantel para ir cogiendo ritmo y compenetración con el grupo.
Desde ya, el club lo considera un futbolista de la plantilla con todos los derechos y deberes e, incluso, en la plaza de Pontevedra no descartan que pueda disponer de dorsal una vez que comience la temporada. La ruptura de la negociación no sentó nada bien en la entidad blanquiazul. Fuentes del club aseguran que el acuerdo entre el Krasnodar y los gallegos era total y que también había pacto entre el futbolista y la entidad rusa. De otro modo, el Deportivo no habría autorizado a Sidnei a viajar, primero a Austria, y luego a Rusia, aunque se desconoce si llegó a realizar este último desplazamiento, ante la ruptura de las negociaciones.
La sorpresa en A Coruña fue tal al conocerse el desenlace final de esta historia que ha generado cierta desconfianza de que, en un futuro, pueda volver a suceder, por lo que el club no está dispuesto a más sobresaltos de este tipo. La entidad blanquiazul no está dispuesta a regalar a Sidnei, después de haber pagado 6,5 millones por él al Benfica, cuando el Valencia ofreció 10 millones en el verano del 2010. El acuerdo que tenían los gallegos con los portugueses era que, en caso de una propuesta firme, la entidad lisboeta se llevaría los tres primeros millones, el Dépor los dos siguientes y a partir del séptimo se repartirían las ganancias. De este modo, tocó pagar 6,5.
Por este motivo, y aun cuando consideran rentabilizado una parte del fichaje, los rectores blanquiazules entienden que, centrado y motivado, Sidnei puede ser uno de los mejores centrales de la Segunda División, por lo que o es a cambio de una buena inyección económica o el brasileño seguirá en A Coruña. El hecho de que todavía no haya conseguido la nacionalidad española está provocando que muchos clubes se retraigan a la hora de realizar una importante oferta económica. En el caso del Dépor, también supone un contratiempo para quedarse, puesto que en Segunda hay una plaza de extracomunitario menos que en Primera, es decir, solo dos.
En la actualidad, el Deportivo tiene en su nómina de centrales a Pablo Marí, Raúl Albentosa, Schär, Eneko Bóveda (Natxo González dijo que lo quería en esta posición) y el juvenil Mujaid, además de Sidnei. De estos, Albentosa se irá fijo y Schär es probable que también, dado que el Mundial le ha servido para revalorizarse. Así, si el brasileño se quedara, estarían ya los cuatro puestos perfectamente cubiertos.