Adrián se une a los defensores de Seedorf con una encendida loa pese al descenso
03 may 2018 . Actualizado a las 16:15 h.A lo largo de esta década turbulenta de banquillo caliente en Riazor se había vuelto costumbre la denuncia a toro pasado de las carencias del entrenador. Varios futbolistas saludaron con rajada, a micro abierto o cerrado, el adiós de un técnico incapaz de satisfacer las exigencias de la clasificación. En el durante, sin embargo, la tibieza había acompañado habitualmente las valoraciones acerca del míster de turno. Del silencio al tímido halago, todo lo más. Hasta Seedorf. La nueva política de comunicación se ha sumado al viento a favor del holandés y pese al descenso consumado no hay una sola crítica a su labor. Por el contrario, ahora que la inestabilidad vuelve a rondar el puesto -nunca se fue, en realidad- el actual inquilino acumula encendidos elogios a su tarea. Loas que no reparan en números, como la de Adrián.
El nuevo capitán figura en el limitado abanico de apuestas seguras para sala de prensa. Descartados los suplentes, los lesionados, los sancionados, los protagonistas de una pifia reciente, los que se han hecho voto de silencio y quienes amanecieron sin ganas de hablar, hay rostros que acumulan horas frente a la cámara incluso en esta época de ley seca de declaraciones, tan útil para remontar plazas en la clasificación. Así que ayer fue Adrián el primero en ponerle cara y voz al descenso. Antes de escuchar preguntas, abrió con una mención: «Quiero felicitar a las chicas del femenino por haber conseguido la Copa de Galicia». A partir de ahí, breve acto de contrición, y encendida defensa del entrenador que consumó el descenso con dos victorias en trece partidos. Números que contrastan con la percepción que varios futbolistas tienen de la labor del técnico, empezando por el delantero ausente en la última final perdida esta campaña. «Viendo el partido desde fuera acabé muy orgulloso del equipo», proclamó el atacante, a modo de avance de su reflexión.
Casi de inmediato, profundizó: «El míster que tenemos es muy bueno. Desde que ha llegado nos ha transmitido un positivismo enorme».
Sostuvo que «el equipo ha ido de menos a más» y aunque regateó al valorar la posible continuidad del técnico en Segunda ?«No me corresponde entrar a valorar ese tema»?, ofreció motivos para que el club opte por esta opción: «Lo que está claro es que con su llegada hemos conseguido lo que no habíamos logrado durante parte del año. Hemos sido un equipo más sólido, más intenso, y él ha tenido mucho que ver en eso».
El asturiano causará baja
Una reflexión que no está ligada al futuro del propio Adrián, quien no seguirá en el Dépor, aunque se resistiera ayer a manifestarlo con claridad. «Lo que puedo decir es que siempre que he estado aquí he sido feliz. Siempre me ha tratado bien la gente y le tengo muchísimo cariño. Aquí estoy contento, pero luego como no depende de mí tampoco puedo hablar demasiado», argumentó. Concluidas las próximas tres citas, la relación entre el míster y su capitán quedará así limitada a lo que supone compartir representante y a la pública admiración: «Es un entrenador muy exigente. Tiene mucha experiencia. Éramos bastante vulnerables y defensivamente nos ha hecho ser más fuertes. Tácticamente hemos mejorado, físicamente hemos mejorado, y mentalmente hemos mejorado».
Semejante fervor sitúa al delantero a la altura de Albentosa o Juanfran, quienes ya habían hecho pública su admiración por Seedorf, su método de trabajo y su propuesta de juego. Otros han compartido esta opinión sin micro por delante; casi todos, habituales en el once del holandés. La clara separación de roles impuesta por el míster, que ha reducido a trece la nómina de futbolistas de cierta relevancia, le ha generado sin embargo detractores en el plantel. A estos es más complicado escucharlos, desprovistos de altavoz.