El estadio Metropolitano prolonga la racha de derrotas del equipo coruñés en territorio colchonero
02 abr 2018 . Actualizado a las 00:00 h.Al Deportivo se le fue este domingo uno de los últimos trenes de la permanencia al perder 1-0 ante el Atlético pese a hacer un encuentro más que decente. El equipo coruñés buscaba en su primera visita al estadio Wanda Metropolitano romper la pésima racha de resultados que había firmado recientemente en el anterior feudo rojiblanco -el Vicente Calderón-, donde había perdido en sus once precedentes más cercanos, los seis últimos sin marcar; y no pudo cambiar ni una cosa ni la otra.
Esta derrota supone para el Deportivo encadenar su decimoquinto encuentro liguero sin ganar -desde que lo hiciera ante el Leganés el 9 de diciembre-, con lo que fija un nuevo hito negativo en la entidad herculina en Primera división, superando los catorce partidos sin ganar que ya encadenó tanto en 1965-66 como en el año 2015.
Uno de los daminificados por esta racha es Florin Andone, que aumenta su registro y ya va por 18 partidos seguidos de Liga sin conseguir el triunfo -segunda mayor racha vigente del campeonato, tras el dato del armero David Lombán (19)-, aunque aún tiene muy lejos el récord absoluto de la categoría, en poder del osasunista Jaime Romero, que enlazó 31 partidos sin ganar.
Nuevamente hay que mirar las estadísticas de Clarence Seedorf en el banquillo gallego, que mantiene su cero en el casillero de victorias tras ocho partidos, un pésimo inicio que únicamente vivió en A Coruña el técnico Enrique Orizaola en el año 1966.
Cabe decir que su homónimo en los locales, Diego Pablo Simeone, sabe bien cómo afrontar estos choques, ya que sigue sin conocer la derrota en sus ya diez encuentros de Liga frente a los blanquiazules (siete victorias y tres derrotas), dato que le sitúa como segundo entrenador con más duelos ante el Dépor en Primera división sin perder nunca, sólo superado por Unai Emery, que se ha mantenido invicto en sus trece enfrentamientos.
Al Deportivo se le olvida marcar
Cuando quedan ocho jornadas, no ganas desde diciembre y la permanencia se escapa a ocho puntos más el golaveraje, la falta de gol se convierte en el último clavo de tu ataúd. Como sobran todas las excusas, a este Dépor solo hay que medirlo por las realidades. Y los coruñeses disfrutaron de las mejores ocasiones para ganar a un Atlético sin buena parte de sus figuras, pero volvieron a perder. Un mano a mano de Lucas ante Oblak, salvador con el pie, y un cabezazo fuera de Mosquera, quien remató solo y a placer en el segundo palo, tuvieron que dar ventaja al descanso a un equipo por fin serio a domicilio. Luego, otra carrera de Borja Valle al encuentro del portero volvió a quedarse sin premio justo en el momento en que el cuadro de Seedorf solo necesita goles, puntos y victorias. Por eso, el choque siembra por igual esperanza y pesimismo en un equipo al que hace muchas jornadas que se le agotó el tiempo.