La confusión del presidente del Girondins cuando anunció su cesión al conjunto coruñés en lugar de al Málaga se debió a que los gallegos tienen la firma del club francés y del jugador para el próximo año
03 sep 2017 . Actualizado a las 22:54 h.El Deportivo no se conformó durante el pasado mercado estival con cerrar la plantilla de la presente temporada. El club coruñés fue más allá y firmó el primer contrato del ejercicio 2018-19. Se trata de Diego Rolan, el delantero uruguayo que militaba en el Girondins de Burdeos y esta campaña actuará en el Málaga en calidad de cedido.
Cuando el sábado de la semana pasada Stéphane Martin, presidente del Girondins, anunció la ampliación de contrato del sudamericano y su cesión al Deportivo con opción de compra obligatoria, no fue un error totalmente absurdo de confundir simplemente al club coruñés con el Málaga, entidad en la que finalmente ha desembarcado. En su cabeza estaba un acuerdo cerrado días antes con los coruñeses. La historia se remonta a principios de verano, cuando los responsables blanquiazules no sabían todavía cuántos extracomunitarios tendrían en sus filas. Llegó la posibilidad de incorporar a Diego Rolan y se lanzaron a por él. Internacional absoluto, con más 25 partidos con su selección, goleador, 24 años, y con polivalencia para adaptarse a los puestos de arriba. Los técnicos deportivistas lo consideraron una pieza interesante para acompañar a Andone en el ataque coruñés.
Se iniciaron las negociaciones y otros clubes, como el Fulham se interpusieron. Pero el jugador había elegido A Coruña y no cedió en su deseo recalar en Riazor. Le quedaba un año de contrato y no estaba dispuesto a irse a ningún otro club ni renovar. Anunció a los rectores franceses que aguardaría un año y se vendría libre al Dépor. Tan firme era su postura que el Girondins acabó por aceptar el traspaso al Deportivo. Pero el conjunto coruñés seguía sin liberar plazas de extracomunitario (ya había incorporado a Fede Valverde) y la nacionalidad de Sidnei se mantenía estancada. Así que el Deportivo trazó una nueva estrategia.
Mantuvo el acuerdo con el Girondins y con el jugador (no han trascendido cantidades ni tiempo), pero retrasando un año el pago y dejándolo esta temporada cedido. Entretanto llegó el Málaga y negoció su incorporación con la entidad, que lo acabó cediendo con el visto bueno de la entidad presidida por Tino Fernández. Con este préstamo, el equipo gallego también se ve favorecido puesto que el Málaga se hace cargo de la ficha, además de abonar una cantidad por la cesión, que se descontará del dinero pactado por el Deportivo por la compra del jugador. Negocio redondo.
Ampliación y contrato privado
Para poder realizar esa cesión, el Girondins tuvo que ampliar el contrato del uruguayo por dos años, algo que, según las fuentes consultadas por este diario, no invalida el contrato privado sellado con la entidad francesa.
Ahora, una vez se cumpla el año de cesión en el Málaga, Rolán seguirá siendo blanquiazul, pero en A Coruña. Salvo que la entidad del jeque Al Thani haga efectiva la opción de compra que tiene, pero, en este caso, el Deportivo también saldría ganando, porque esta es por un precio bastante superior al de la compra, de modo que sacaría rentabilidad a un futbolista sin que este llegara a defender su escudo.
Una compleja operación que, hasta el momento, los dos clubes protagonistas han querido mantener en secreto. Tanto, que ninguno de los presidentes consultados durante los últimos días al respecto, han querido manifestarse. «La política del club es de no comentar este tipo de cosas», se limitó a decir ayer mismo Stéphane Martin, máximo responsable del Girondins. Por su parte, Tino Fernández lo dejó claro hace una semana: «No decimos nada sobre Diego Rolán. Se explicarán las operaciones al término del mercado».