La esperanza se llama Joselu

Alexandre Centeno Liste
alexandre centeno REDACCIÓN / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

El silledense regresó ayer a los terrenos de juego tras más de dos meses lesionado, buscó protagonismo y cerca estuvo de estrenarse como goleador

30 nov 2016 . Actualizado a las 16:17 h.

Más de dos meses después de que Raúl García lo mandara a la enfermería, Joselu Mato regresó a los terrenos de juego para ofrecer algo de esperanza no solo al partido de ayer, sino a la temporada en general.

El silledense saltó al campo a los sesenta y siete minutos y solo necesitó tres para encontrar su primer balón aéreo, luchar por él y conseguir rematar, aunque desviado. Primera advertencia del delantero gallego que tenía ganas de balón y sed de gol. Y tanta, porque seis minutos después aprovechó un buen centro de Luisinho y exhibió todos los conceptos que definen a un gran ariete: se elevó, hizo el giro perfecto, dirigió el esférico pero se le fue fuera por escasos centímetros.

Fue su gran ocasión, pero no se acabó ahí su tesón. Joselu tenía ganas de balón, de lucha, de desmarques, de ser protagonista en su regreso. Y se dejó caer a banda, bajó hasta la línea de medios, peinó balones por alto y hasta intentó revolverse en el borde del área para chutar, aunque el defensa anduvo más rápido.

Fueron solo 23 minutos en los que no varió el marcador, ni siquiera el dominio del Dépor que ya llevaba tiempo siendo protagonista, pero la diferencia que aportó Joselu fue demostrar que puede ser un excelente compañero de aventuras de un Florin Andone que esta temporada se ha visto excesivamente solo en demasiados encuentros. Resultó su vuelta una excelente noticia que celebró Gaizka Garitano, para quien «es importante contar con una pieza más para la plantilla».

El regreso del delantero blanquiazul fue de lo más destacado de un Deportivo que ayer vivió el debut de los dos únicos futbolistas que esta temporada se encontraban inéditos. Fue el caso de Rubén Martínez y Álex Bergantiños. 

Los debutantes

El portero de Coristanco pasó prácticamente inadvertido en el partido, ya que el Betis apenas creó situaciones y en el gol poco más pudo hacer que recoger el balón de dentro de la portería, porque el remate de Sanabria, con permiso de Fernando Navarro, fue franco y bien colocado. Un «error», el gol en sí para Garitano, que marcó el partido.

El otro debutante, el de la Sagrada Familia, tampoco tuvo incidencia. Ni para bien, ni para mal. Acusó no haber tenido ni una oportunidad en el primer tercio de la competición y, aunque se mostró tan voluntarioso como siempre, no tuvo la aportación de temporadas anteriores. Tampoco cometió errores de bulto. Un premio jugar ayer para un futbolista del que Garitano siempre elogia su trabajo semanal pero nunca le da oportunidades los fines de semana.

Ayer lo hizo en un partido que el técnico vasco vio de clara tendencia blanquiazul y en el que solo «un error y la falta de acierto en ataque» privaron al Deportivo de mayor premio.