La asignatura pendiente del Dépor

Alexandre Centeno Liste
Alexandre Centeno A CORUÑA / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

CESAR QUIAN

Los homenajes a sus figuras más emblemáticas es uno de los retos que le quedan por cumplir al consejo de administración que preside Tino Fernández

08 abr 2016 . Actualizado a las 13:28 h.

Fran, Mauro Silva, Donato, Bebeto, Arsenio, Valerón... Muchos han sido los futbolistas que en los últimos treinta años han marcado época en el Deportivo y que no han obtenido un reconocimiento oficial por parte del club.

Todos tuvieron un cariñoso homenaje por parte de la afición, que los vitoreó en el momento de su adiós, y llenó de emotividad su despedida. Pero no de la institución, que con el anterior consejo de administración los dejó marchar a todos sin un cariño. Muchos incluso por la puerta de atrás. Ni un homenaje en los últimos treinta años para futbolistas con más de una década paseando el escudo del Dépor por medio mundo.

Con la llegada de Tino Fernández a la presidencia del Deportivo se dio un gran paso al frente en el trato a los que fueron glorias blanquiazules. El primer consejo de administración del nuevo equipo de gobierno aprobó por unanimidad ofrecerle a los veteranos la camiseta y el escudo de la centenaria entidad. Se les empezó a invitar al palco. Se contó con ellos en los actos del club. Y, finalmente, aun permitiéndoles mantener la independencia, se les incluyó en la estructura del Deportivo.

El paso que le falta por dar a Tino y su equipo es recuperar los homenajes a sus jugadores más emblemáticos.

En el recuerdo de la hinchada blanquiazul aún queda ese caminar cabizbajo de Arsenio Iglesias el 28 de junio de 1995 abandonando el estadio municipal de Riazor tras hacer campeón de Copa al Deportivo. O el adiós de un Donato que hizo historia marcando el gol que dio la Liga al club. Una despedida lesionado y sin luz.

El templo deportivista no olvida cómo Juan Carlos Valerón pedía perdón al tiempo que se iba en silencio el mismo día que el segundo descenso, casi consecutivo, se producía.

El siguiente en irse será Manuel Pablo. El futbolista que más temporadas ha defendido la elástica blanquiazul en Primera División se despedirá esta temporada. Y, al igual que otros muchos, se merece el reconocimiento del club. Sin embargo, en contra del de Bañaderos juega esa política llevada durante varias décadas de no hacer homenajes. Por eso, Manuel Pablo tendrá que conformarse con el reconocimiento de la afición y, si la situación en la clasificación lo permite, disfrutar de unos minutos en Riazor. Aunque probablemente le hubiera gustado hacerlo, el consejo no puede romper con el canario esta actitud. Antes es el turno de figuras tan representativas como Fran, Mauro y un Arsenio que sería la figura ideal para iniciar una nueva política. En manos del consejo está.

Polémica despedida de Mauro y Fran

Con un Dépor que deambulaba por la mitad de la tabla y en las últimas semanas de Irureta al frente de la primera plantilla, en el mes de mayo del año 2005 el deportivismo estaba centrado en despedir a lo grande a Mauro y Fran. Incluso el Concello aprobó dar nombre a una calle, algo que todavía no ha sucedido.

La afición se pronunció pidiendo un homenaje a ambos, protagonistas de los mejores años de la historia. Pero Lendoiro se negó. Incluso llegó a prohibir a algunos aficionados hacer entrega de una placa a los jugadores.

Pero la hinchada y la plantilla sí estuvieron a la altura del acontecimiento y convirtieron aquel triste 22 de mayo en uno de los días más felices para los dos héroes blanquiazules. Sus compañeros saltaron al campo con una gran pancarta con el rostro de Fran y Mauro y el lema: «Gracias». Irureta, que no los alineó de inicio, sí les permitió disfrutar de unos minutos de gloria. La grada pidió a gritos que Fran portara el brazalete de capitán, pese a saltar desde el banquillo. Y al acabar el duelo contra el Mallorca (0-3), los fans corrieron al césped para sacar a hombros a sus héroes.

Así, el 5 y el 6 del Dépor tuvieron la despedida que el consejo de administración se negó a brindarles.