Sin intención alguna de comparar a un futbolista en ningún aspecto y solo tomando como referencia su labor y situación en el campo, entiendo que el Deportivo con Pedro Mosquera ha conseguido un jugador del estilo de Sergio Busquets. De los que abundan muy pocos con buenas condiciones. El coruñés, las tiene.
Por lo que estamos viendo, está adoptando esa figura de iniciador, el hombre que enlace la fase de comienzo de las jugadas con la zona de elaboración del juego. Se encuentra más cómodo recibiendo con espacios y levantando la cabeza para seleccionar bien el pase. Que puede hacerlo en corto, en largo, cambio de juego... Son muchos los recursos que maneja, pero siempre partiendo desde atrás, casi desde la línea defensiva.
A partir de ahí, y viendo la cantidad de futbolistas que maneja el Deportivo en esa zona del medio del campo, entre los que incluyo a Cani, al que por su edad creo que ya le viene mejor actuar ahí que como extremo, Víctor tiene la posibilidad de hacer mil y una combinaciones. Y en, prácticamente, todas aparece Pedro Mosquera.
En este sentido, el entrenador blanquiazul debe pensar cómo quiere hacer jugar al equipo, si con dos mediocentros o con tres. Incluso, como ya dijo en más de una ocasión, puede variar el planteamiento dependiendo del partido y del rival.
Yo a Mosquera lo veo más jugando con una línea de tres. El más atrasado y dos delante para elaborar por dentro para luego abrir a las bandas. Para eso cuenta con el ya citado Cani, Medunjanin, Juan Domínguez... Y entonces, el exfutbolista del Elche iniciaría la acción con fútbol sencillo, buscando el balón y eligiendo en cada momento la opción adecuada de pase, con varias opciones en su horizonte.
Por lo que se ve, además, aun llevando poco tiempo aquí, es de los que no les cuesta asumir el rol y parece que querrá llevar la manija del juego.
Creo que puede aportar mucho en la creación y luego, a la hora de defender, sí que necesitará más apoyo que un especialista como Álex Bergantiños más acostumbrado a mantener la posición tácticamente en las labores de destrucción del juego.