En busca de la resurrección

Pedro José Barreiros Pereira
pedro barreiros A CORUÑA / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

El Dépor recibe al Villarreal en una de sus últimas oportunidades por agarrarse a Primera División

02 may 2015 . Actualizado a las 17:33 h.

Casi todo se ha dicho ya del caminar liguero de este Dépor. De tanto mirar por el espejo retrovisor en busca de tres rivales a los que dejar por detrás y condenar al descenso, ha terminado por estrellarse incapaz de encauzar su propia trayectoria. Pagado de sí mismo, con varios internacionales en sus filas y aún reforzado de nuevo en enero, pero siempre seriamente afectado por gravísimos problemas para competir, se relajó a la espera de que la permanencia cayese como fruta madura, hasta que acabó por estrellarse con el árbol. Las cuatro bofetadas del pasado miércoles en Elche podrían tener el efecto de despertar de una vez a un equipo al que apenas le quedan ya oportunidades para sostenerse en Primera División.

A trancas y barrancas alcanza el penúltimo compromiso de la temporada en Riazor apartado de forma matemática de las posiciones de descenso, pero realmente en busca de un milagro que le permita llegar con vida a las tres jornadas finales, pues le espera el peor calendario de sus contrincantes por seguir en Primera. Esta noche se enfrenta a un Villarreal encaramado a las posiciones europeas desde el principio y que lo vapuleó sin remisión en la primera vuelta, pero que no ha ganado en las ocho últimas jornadas, cuando apenas ha marcado un gol. Luego le seguirá la visita a San Mamés, la despedida en A Coruña contra el Levante y el cierre a la temporada en el Camp Nou.

Planes

Es difícil aventurar la alineación que Víctor Sánchez compondrá para el trascendental choque. Al cansancio de los compromisos consecutivos (el de esta noche se convertirá en el tercero de los últimos siete días) y al pobre rendimiento demostrado por los habituales se añade la búsqueda desesperada de tres puntos acuciantes para la clasificación y que, de paso, actúen como pegamento con la afición, muy disgustada con su equipo.

Así, tan solo el portero Fabricio parece seguro en la alineación. Aunque el Dépor se entrenó ayer y el técnico anunció una convocatoria de dieciocho futbolistas, como el encuentro no comenzará hasta las diez de la noche, está previsto que esta mañana vuelvan a ejercitarse en el propio estadio de Riazor. Será la hora de la última conjura, la que puede hacer realidad el milagro que necesita este Deportivo.

Fariña y Salomão, descartados para el vital choque

Tras la tempestad del jueves, ayer regresó la calma al entrenamiento deportivista, en el que el fútbol volvió a llevarse todo el protagonismo. La veintena de aficionados que acudieron a Abegondo, muchos acompañados de niños, siguieron en silencio los ejercicios y apenas reaccionaron cuando los jugadores se retiraron a los vestuarios. Tan solo un espontáneo grito de «vamos, Álex, ánimo», en alusión a Bergantiños, brotó de la grada, vigilada por agentes de la Guardia Civil y de la seguridad privada del club. Concluida la tarea, toda la atención se volvió hacia la convocatoria de Víctor Sánchez, quien se había retirado del césped mientras charlaba brevemente con el consejero Fernando Vidal y los responsables de la secretaría técnica, Richard Barral y Ernesto Bello.

El entrenador deportivista compuso una convocatoria marcada por la ausencia por lesión de Juan Domínguez, al que ni siquiera se le vio en el campo, y los llamativos descartes de Fariña y Salomão, quienes el pasado miércoles habían saltado al campo en la segunda parte, como primeros revulsivos cuando el marcador ya era de 3-0. Tampoco figuraron en la lista Wilk, quien ayer se entrenó en el campo junto al recuperador del club y parece apurar sus posibilidades de llegar a tiempo para las jornadas finales de Liga, así como Canella, Postiga, Medunjanin y Borja López, quienes ya no habían entrado en los planes de la última jornada.

Por el contrario, Manuel Pablo, Cuenca y Helder Costa figuraron esta vez entre los elegidos e incluso los dos primeros podrían formar en la alineación inicial de esta noche. El capitán entraría como improvisado lateral zurdo, posición en la que el técnico madrileño ya lo situó durante su estreno en el banquillo en San Sebastián. Cuenca, por su parte, encontraría un hueco en la banda derecha, su posición natural, aunque su ubicación final sobre el campo dependerá de la situación de los otros dos mediapuntas, pues la polivalencia de Cavaleiro y Lucas les permitiría jugar en varias posiciones del once que Víctor Sánchez disponga.

A las once de esta mañana, solo unas horas antes de pitido inicial, el entrenador del Dépor y los dieciocho futbolistas convocados pergeñan los detalles finales del encuentro sobre el césped del estadio de Riazor.