Su baja por lesión vacía la mediapunta en el previsible debut de Postiga
14 sep 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Ya es mala suerte. Justo cuando el Dépor cuenta las horas para el debut de Postiga, el ansiado goleador, una lesión convierte en baja a Fariña, llamado a convertirse en su principal socio. Tras resentirse en el entrenamiento del pasado jueves de unas molestias en la cadera, las pruebas practicadas al jugador argentino revelaron una pequeña lesión muscular, por lo que se perderá el partido de mañana (20.45 horas, Canal+ Liga y GolT) contra el Eibar y es duda para el compromiso del próximo sábado contra el Madrid, aunque se espera que esté listo para el derbi contra el Celta.
La ausencia de Fariña priva al equipo coruñés de uno de sus futbolistas más en forma de mediocampo hacia delante. Su juego y su coraje se tornaron insustituibles desde que llegó en préstamo por el Benfica. No solo por aquellos dos goles en la semifinal del Teresa Herrera. Profundo y decisivo, aunque con intermitencias, Víctor Fernández lo alineó de inicio en banda contra el Rayo, pero le dio el mando cuando hubo que buscar la remontada final. Y porfió en busca del empate hasta el minuto final.
Quienes lo habían disfrutado en el Racing argentino sostienen que fue en esos instantes cuando más se pareció a aquel jugador tan capaz de encontrar un hueco imposible para un pase en profundidad, como de desequilibrar con un chut envenenado. Ahora, en cambio, el Dépor lo pierde frente a otro rival directo por la permanencia y abre el debate sobre su sustituto, pues mientras Lucas Pérez continúa de baja en la plantilla no hay ningún otro mediapunta natural, aunque sí un buen puñado de atacantes polivalentes. Todo dependerá del sistema por el que Víctor Fernández se decante finalmente.
Si elige el 4-2-3-1 con que abrió la temporada en Granada, el técnico se aboca a adaptar a esta posición, la del mediapunta, la que en el fútbol clásico ocupaba el dorsal diez, a un jugador fuera de su puesto natural. Con Postiga como referencia Toché jugó ahí el pasado jueves en Vilagarcía, y hasta marcó un gol a pase del delantero portugués. También podría resituar al talentoso Cuenca o dar entrada a Cavaleiro, autor del gol en la primera jornada, aunque cuando hubo que remontar al domingo siguiente apenas disputó los diez minutos finales.
Incluso Medunjanin podría aparecer en esta posición, la predilecta en los inicios de su carrera y hasta cuando militaba en el Valladolid, aunque desde que llegó y se vistió la camiseta blanquiazul se declaró más defensivo y su entrenador lo ha alineado en el mediocentro. Esta posibilidad también podría llegar a abrir el once a Wilk o a Álex Bergantiños.
En la última noche de fútbol en el estadio de Riazor contra el Rayo el Dépor jugó con un 4-3-3 en el que Fariña se desplazó a la banda izquierda. Si repitiese este esquema en Ipurúa, tendría cabida el recién llegado Juanfran (quizá a banda cambiada, o quizá desplazando a Cuenca a la izquierda), el ya referido Cavaleiro o hasta Luisinho, zurdo y el elegido para la banda en la jornada inaugural.
Sea cual sea el elegido, se espera que el Eibar plantee un partido intenso y sin descanso, en el que la baja de Fariña se revele como un contratiempo más para que los deportivistas marquen el ritmo del partido.