El Dépor tiene por delante un verano intenso. Todo apunta a que apenas un puñado de los integrantes de la plantilla de veintidós futbolistas con que culminó la temporada formarán parte de la que asumirá el reto de la permanencia en Primera División. Y eso que en la primera plantilla hay catorce futbolistas con contrato en vigor. Se trata de Fabricio, Laure, Insua, Seoane, Luisinho, Álex Bergantiños, Juan Domínguez, Wilk, Juan Carlos, Arizmendi, Toché, Borja, Luis Fernández y Rudy. A estos se podría añadir a los fabrilistas Teles, quien jugó cedido en Segunda B, y el meta Felipe Ramos, con una campaña más firmada en el club. Pero es que entre todos, apenas cinco se pudieron considerar titulares indiscutibles a lo largo de la temporada: Laure, Insua, Luisinho, Álex Bergantiños y Juan Domínguez.
Así, a pesar de aquellas declaraciones de Fernando Vázquez, en la que aseguraba que este Dépor hubiera sido capaz de competir en igualdad con sus contrincantes por la permanencia en Primera División, queda mucho por apuntalar. El técnico reveló recientemente que desea una plantilla corta, en la que el escaso presupuesto se destine a la calidad antes que a la calidad. En este sentido, y con las restricciones económicas conocidas, vuelve a revelarse de vital importancia la previsión y el acierto en las decisiones de los responsables deportivos.
Desde luego, la base defensiva parece dispuesta, pero queda mucho por diseñar en cuanto a la estructura de ataque del nuevo Dépor. Con Juan Carlos, Arizmendi, Toché, Borja, Luis Fernández y Rudy como únicos jugadores con contrato en vigor de mediocampo hacia delante, todo está por decidir en esta parcela. No solo se espera la llegada de nuevos mimbres para armar un proyecto en la máxima categoría, sino también de jugadores capaces de marcar la diferencia y liderar el nuevo proyecto.
Todo comenzará a diseñarse esta misma semana, cuando Fernando Vázquez se sentará con la dirección deportiva del club y comenzarán a dibujar el boceto del nuevo Dépor. Está en juego dejar atrás el rol de equipo ascensor y pasar del sueño a la realidad el lema del ascenso: Primeira para sempre.