El equipo coruñés inicia la carrera por ascender, en la que aún se enfrentará al Recreativo y al Eibar
31 mar 2014 . Actualizado a las 11:27 h.Al Dépor solo le queda mirar hacia delante en la carrera por el ascenso directo. Depende de sí mismo cuando se abre el exigente maratón de las diez jornadas finales. Si sostiene la distancia sobre sus adversarios, los coruñeses jugarán la próxima temporada en Primera. Fernando Vázquez había cifrado el retorno a la máxima categoría en los 75 puntos, para los que tendría que sumar 21 más, es decir, ganar siete partidos más. Se estima que subir estará mucho más barato, que se precisarán unos guarismos menores a estos, pero su equipo no dispondrá de un calendario cómodo.
El mayor peligro se revela en sus problemas para ganar los partidos de Riazor, pero en este aspecto sale favorecido, pues tan solo tendrá que jugar cuatro partidos como local. En cambio, entre estos se encuentran dos de sus contrincantes por el ascenso directo: el Recreativo, dentro de solo dos semanas, y el Eibar, a solo tres jornadas del final. Al margen de estos, la Ponferradina y el Jaén, ambos actualmente en lucha por evitar el descenso, también visitarán Riazor. En la última jornada los coruñeses jugarán en Montilivi contra el Girona, que por entonces podría estar descendido.
La lucha por ocupar las dos primeras posiciones de la clasificación parece cerrada a cinco equipos. El Eibar, líder en las ocho últimas jornadas, así como el Las Palmas, que ha ganado cinco de sus seis últimos compromisos, el Sporting, autor de al menos un gol en el 93 % de sus partidos, y el Recreativo, que no gana desde febrero, acompañan al Dépor en la lucha.
De estos cuatro adversarios, solo el Sporting no deberá afrontar ningún duelo directo por el ascenso. Así, a igualdad de puntos solo superaría al Dépor, mientras quedaría relegado por el Eibar y el Las Palmas. En caso de empate con el Recreativo, decidiría la diferencia global de goles. El Eibar aún ha de enfrentarse al Recreativo (en Ipurúa) y al propio Deportivo, mientras el decano del fútbol español parece contar con el calendario final más complicado, pues aún debe verse las caras contra el Dépor, el Eibar y el Las Palmas, todos a domicilio.