La alegría del último suspiro

Vicente Leirachá
Vicente Leirachá PUNTO DE MIRA

TORRE DE MARATHÓN

21 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Recordarán que lo habíamos previsto en alguno de los comentarios previos al partido. Este Deportivo-Zaragoza (1-1) se presentaba difícil para el actual equipo coruñés, también para el aragonés que vino a Riazor, una temporada más, acuciado por la necesidad de puntuar. Sucede que en los tiempos actuales uno y otro fueron bajando en el escalafón, si recordamos tiempos pasados que tanto añoran esos aficionados que gustan de hacer comparaciones.

Si hablamos del Zaragoza, resulta inevitable una mención a los 5 magníficos, tal como se hicieron famosos en el mundo del fútbol aquellos cinco delanteros que triunfaron a orillas del Ebro. Vamos a mencionarlos: Canario, Santos, Marcelino, Villa y Lapetra. Metidos en este terreno de los recuerdos, también encontramos fácilmente ases del balón en el equipo de Riazor, pero nombrarlos en estos momentos acentuaría todavía más la diferencia con los artilleros actuales que, nadie pone en duda, hacen todo lo que saben y pueden pero las circunstancias adversas se les agigantan de forma muy continuada. Como ayer, en Riazor, en donde esos dos equipos que fueron grandes en tiempos no muy lejanos, corrieron, pelearon y sus hombres no volvieron la cara cuando creían tener los goles al alcance, pero les faltó acierto. Consiguieron uno por bando, aunque quizá el 0-0 hubiera reflejado con más exactitud el desarrollo de este partido que finalizó, para el deportivismo, con esa alegría inevitable y explosiva que celebra todo aquel que escapa de la derrota en el último suspiro.

Esperemos que, en el próximo partido, el balón ruede mejor?