El presidente pesetero

Fernando Hidalgo Urizar
Fernando Hidalgo EL DERBI

TORRE DE MARATHÓN

20 mar 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Lendoiro demostró una vez más que lo que realmente le importa del Deportivo es lo que de él puede sacar. Convocó una rueda de prensa en la que, una de nuevo, prohibió la entrada a los periodistas de La Voz de Galicia para evitar sus preguntas y para atacar a este periódico. Y una vez en faena, ofreció un auténtico mitin en el que el egocentrismo, el egoísmo, la prepotencia y la opacidad se impusieron claramente a la autocrítica, la humildad, la generosidad y a la verdad, siempre la gran damnificada.

Lendoiro defendió a muerte su sueldo, dando unas explicaciones peregrinas sobre el asunto del registro mercantil. Atacó gravemente a los administradores concursales. Dijo que si el Deportivo era viable lo era gracias a él, que no pensaba cambiar nada de su gestión, criticada en el informe, y que nadie mejor que él para seguir al frente de la entidad. Primero él, después él y al final, él.

Definitivamente, lo que más le importa a Lendoiro del Deportivo es el generoso sueldo que le paga, las cenas que le costea, y la posibilidad de haber creado alrededor del club una especie de agencia de colocación que quizá haya beneficiado más a su familia que al propio club.

Por lo demás, Lendoiro discutió mucha letra pequeña del informe concursal, pero no desmintió la mayor, que engañó a todo el mundo ocultando la situación de ruina del Deportivo y que en el proceso concursal solo se está preocupando de salvarse a sí mismo y a su sueldo. Él, precisamente él, que se permite llamar capitán pesetero a Fran.